Leclerc describe la intensa fatiga padecida en el GP de Qatar: «Tal vez la subestimamos»
Charles Leclerc dijo que la carrera de Lusail fue la más dura que había hecho en su carrera debido tanto al calor como al fuerte ritmo que supuso el mayor número de paradas en boxes.
Como casi todos los pilotos que participaron en el Gran Premio de Qatar el domingo (8), Charles Leclerc también habló de cómo el calor fue un factor importante durante la carrera. El monegasco, que llegó quinto y fue el único piloto de Ferrari que tomó la salida después de que Carlos Sainz tuviera una fuga de combustible, dijo que la competencia en Lusail fue la más difícil de su carrera.
Leclerc, que terminó la carrera en la misma posición en la que se clasificó, acabó siendo adelantado por los McLaren, que salían más atrás en la parrilla, y también quedó por detrás de George Russell, que fue golpeado por Lewis Hamilton al inicio de la carrera y cayó al último puesto.
«Creo que todo el mundo sufrió, sin excepción. Es difícil expresar con palabras lo duro que fue. Fue el doble de pesado que una carrera como la de Singapur. Sinceramente, es con diferencia la carrera más dura que hemos hecho en nuestra carrera», analizó el #16.
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El monegasco señaló tres razones principales de la extrema dificultad de la carrera. En primer lugar, el calor sofocante de Qatar. En segundo lugar, el circuito de Lusail se caracteriza por muchas curvas de alta velocidad y, por último, la obligación de hacer tres paradas en boxes, lo que llevó a los pilotos a ser agresivos durante toda la carrera, sin la oportunidad de ahorrar neumáticos.
«Pero creo que quizá subestimamos lo que esto significaba para nuestro físico. Estábamos sometidos a mucho estrés en las curvas de alta velocidad, algo que no ocurre normalmente», explicó.
Leclerc también abordó los efectos físicos de la carrera, destacando la deshidratación como un problema importante. El piloto explicó que la pérdida de líquidos afectó a la visión y los reflejos de los pilotos, especialmente en las curvas de alta velocidad, lo que hizo que la carrera fuera aún más difícil.
«En términos físicos, no es que estemos cansados, quiero decir, los músculos no están tan fatigados, es la deshidratación lo que es malo, pierdes tanta agua que la visión se ve comprometida, especialmente hacia el final de la carrera con las fuerzas G en las curvas de alta velocidad, los reflejos también se vuelven más lentos», dijo.
«Llega un momento en el que tienes que preguntarte si deberíamos revisar el número de vueltas, porque nos miramos unos a otros al final de la carrera, mientras estábamos sentados y descansando, y podías ver que algunos pilotos estaban muy mal», añadió el #16.
La Fórmula 1 volverá dentro de quince días, entre el 20 y el 22 de octubre, en Austin, con el Gran Premio de Estados Unidos. GRANDE PRÊMIO seguirá toda la acción en TIEMPO REAL.