El caos climático de los últimos días en el norte de Italia ha llevado al aplazamiento del Gran Premio de Emilia-Romaña de Fórmula 1 de este año, que iba a tener lugar en el circuito de Ímola. Según los medios locales, ya se han registrado cinco muertes y miles de personas han sido desplazadas de sus hogares. La situación de calamidad ha llevado a que varias figuras importantes de la F1 se manifiesten, entre ellas el jefe de Ferrari, Frédéric Vasseur, a través de un comunicado oficial.
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El equipo con sede en Maranello, también ubicado en la región de Emilia-Romaña, correría «en casa» este fin de semana, pero se posicionó a favor de la cancelación y expresó su solidaridad con los afectados por las graves consecuencias de las lluvias.
«Apoyamos completamente la decisión de la Fórmula 1 y la FIA de cancelar la carrera. Aunque sea en nuestra casa y por lo tanto, aún más importante para nosotros, la prioridad principal en este momento debe ser la seguridad de todos aquellos que viven y trabajan en las áreas afectadas», declaró Vasseur.
«En nombre de todos los que trabajan en la Scuderia Ferrari, me gustaría expresar nuestras más sinceras condolencias a todos los afectados por esta terrible tragedia. Emilia-Romaña es nuestra casa y es desgarrador ver lo que las personas están pasando en este momento«, añadió.
Otro miembro de Ferrari que expresó su apoyo, a través de las redes sociales, fue el piloto Carlos Sainz, quien grabó un mensaje en video en la región de los hechos y reportó que todavía está lloviendo en Emilia-Romaña.
«Obviamente, es un día difícil porque el Gran Premio aquí en Ímola está cancelado. Han sido dos días con mucha lluvia y la cancelación del GP es un duro golpe, pero al final lo más importante es que podamos ayudar a todas las personas que han sido evacuadas, a todas las personas que están sufriendo debido a este problema climático», reflexionó Sainz.
«Realmente quería correr frente a todos los fanáticos este fin de semana, pero la seguridad siempre es la prioridad y hay muchas carreras de Fórmula 1. Espero que estén bien y quiero enviar un abrazo a todas esas personas. Si pueden ayudar, al igual que yo lo haré, se los agradecería», concluyó.
El miércoles GRANDE PRÊMIO contactó a la Fórmula 1 a través de su oficina de prensa para saber si la carrera solo se había pospuesto o si no se celebrará en 2023. En una llamada telefónica, un portavoz explicó que no se descarta por completo la realización del Gran Premio de Emilia-Romaña en una fecha posterior, pero considera «improbable» que la carrera tenga lugar aún este año.
La Fórmula 1 debe desmontar la estructura y viajar pronto, ya que tiene el GP de Mónaco programado para la próxima semana, del 26 al 28 de marzo.