Mercedes cita dudas para 2023 y descarta incluir el W13 en museo: ‘Se va a las cavernas’
El jefe de Mercedes, Toto Wolff, reconoció que el equipo aún tiene que definir su enfoque para construir el coche de 2023, pero ya sabe qué hacer con el modelo actual, el W13: enviarlo a las cavernas.
Mercedes parecía ir in crescendo cuando se marchó a su descanso de la Fórmula 1 poco después del GP de Hungría, pero el golpe de realidad que se sintió en Spa, con la dominante victoria de Max Verstappen a su regreso del parón veraniego, ha descorazonado al equipo, además de aumentar la frustración con el W13 y las dudas para 2023.
Tras dos podios consecutivos en Francia y Budapest, el equipo alemán esperaba continuar su progreso en Spa. En este caso ocurrió exactamente lo contrario, ya que George Russell terminó la carrera a 27 segundos del ganador. Lewis Hamilton, por su parte, abandonó en la primera vuelta tras chocar con Fernando Alonso.
Luego de la disputa, el jefe Toto Wolff no se guardó sus críticas al W13 y dijo que en lugar de que el auto aparezca en el museo de la compañía en su sede de Stuttgart, parece más probable que el equipo lo envíe a una caverna… Y no lo vuelva a ver.
«No creo que este coche tenga un lugar de los más altos en el museo de Mercedes en Stuttgart», valoró Toto Wolff, citando el edificio de la escudería en Alemania que incluye los modelos históricos y ganadores de la marca. Están ahí los últimos ocho modelos que se han llevado todos los Mundiales de Constructores de F1 desde 2014. «Tal vez ese vaya a las cavernas», añadió.
¡Conoce el canal de Grande Prêmio en Español en YouTube!
¡Sigue a Grande Prêmio en Español en Twitter y en Instagram!
El reinado de Mercedes entre los Constructores tiene un largo camino por recorrer. Red Bull va camino de ganar los dos títulos en juego esta temporada por primera vez desde 2013 con Sebastian Vettel. Wolff señaló que el concepto diferente de los pontones del equipo alemán impide realizar pruebas más radicales. Además, ya está pensando en qué hacer con el monoplaza del año que viene.
«Es una situación muy difícil. Evidentemente tenemos un determinado concepto de coche», explicó Wolff, citando los sidepods que tanto llamaron la atención en el W13. «No es que podamos probar muchas cosas este año y que podamos sacar cosas para probar», lamentó.
En cuanto al W14, que ya está en la agenda de Mercedes para el campeonato de 2022, Wolff expuso el mayor dilema de la escudería en este momento: como los datos recogidos por el equipo alemán no se traducen en la pista y el coche sigue siendo bastante imprevisible, ¿cuál será el planteamiento del monoplaza del próximo año?
VER TAMBIÉN
Mercedes envía motor de Hamilton para análisis tras incidente con Alonso en Spa
Russell considera “agridulce” ser 4° en Spa y ve a Mercedes “con mejor ritmo” que Ferrari
Fórmula 1 confirma GP de Bélgica en el calendario de la temporada de 2023
«Así que cualquier decisión que tomemos para el próximo año debe ser evaluada cuidadosamente», continuó. «Porque está claro que nuestros datos no nos aportan los resultados, no se correlacionan con la realidad, y tenemos absurdos aumentos de rendimiento que no podemos ejecutar», criticó.
«Al tomar una decisión para el próximo año en ese momento, sea lo que sea -quizás cambiando el concepto drásticamente-, ¿cómo vamos a asegurarnos de que es la mejor dirección? Porque está claro que vamos a empezar muy atrás», valoró. «Ahora, eso va a ser parte de la discusión -que ya hemos tenido- en las próximas semanas sobre lo que hacemos al respecto», cerró.