Alpine es sinónimo de crisis en la Fórmula 1 2023 y solo le queda reinventarse

La expectativa en Alpine era grande para este año. La llegada de Pierre Gasly, para formar una dupla 100% francesa con Esteban Ocon, era el puntapié inicial para dejar atrás un complicado 2022, con varios problemas de fiabilidad, la imprevista partida de Fernando Alonso y la conflictuada salida de Oscar Piastri del puesto de reserva del equipo. Y contrariamente, la escudería de Enstone mostró una peor cara en la primera mitad de la F1 2023, con menos competitividad, despidos masivos y en el medio de una fuerte reestructuración que no traerá soluciones de la noche a la mañana.

Con el flamante A523 en pista, el campeonato ya arrancó con el pie izquierdo para Alpine en Bahréin. Una sucesión de errores y penalizaciones de la estructura dejó fuera de carrera a Ocon, una actuación que el entonces CEO del equipo, Laurent Rossi, calificó como “amateur”, en unas inusuales críticas públicas hacia sus propios dirigidos. La falta de ritmo volvió a evidenciarse en Jeddah, y en Australia, el desastre fue mayúsculo con un violento choque entre los dos autos del equipo sobre el final de la competencia. 

Recién en Mónaco, en la sexta fecha, Alpine dejó atrás brevemente el tormento, con un inesperado podio de Ocon en medio de la lluvia y un clima cambiante. Esta primavera duró poco, y recién en la carrera sprint del GP de Bélgica la escudería volvió a un Top-3, esta vez con Gasly. 

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No obstante, esos resultados aislados fueron insuficientes frente a una temporada en la que el equipo está plantado en el sexto lugar en el Mundial de Constructores. Rivales en temporadas anteriores, McLaren y Aston Martin mostraron momentos de competitividad en 2023, mientras que Red Bull -este año más que nunca-, Mercedes y Ferrari juegan en otra liga. De mitad de pelotón, la única estructura que involucionó fue Alpine. 

MUNDIAL DE CONSTRUCTORES – F1 2023

EQUIPO	PUNTOS
RED BULL	503
MERCEDES	247
ASTON MARTIN	196
FERRARI	191
MCLAREN	103
ALPINE	57

¿Por qué Alpine está en crisis?

Con la refundación del equipo en 2021, tras varios años de competir bajo la marca Renault, Alpine se planteó un objetivo ambicioso: ser un equipo de punta en un lapso de cien carreras, aproximadamente entre cuatro y cinco temporadas. Sin embargo, la urgencia de resultados mutó en una cierta dosis de impaciencia que derivó en frecuentes cambios gerenciales, que lo convirtieron en una escudería inestable. A mediados de 2021 abandonó el equipo Remi Taffin, jefe de motores de Renault por 20 años. Luego, a inicios de 2022 también dejaron el director ejecutivo Marcin Budkowski y el asesor del equipo, Alain Prost. 

La partida de estos directivos, y la llegada de Otmar Szafnauer como jefe de equipo, también coincidió con una mayor injerencia de Laurent Rossi, CEO de la marca Alpine, en el día a día del equipo de la marca en la Fórmula 1. No obstante, pronto quedó demostrada una gestión deficiente de su parte, ante la partida Alonso, que fichó por Aston Martin a mitad de temporada, y la de Oscar Piastri, quien en un principio había sido anunciado como reemplazante del español, pero que firmó por McLaren en un movimiento que generó un conflicto que terminó en la Justicia entre ambos equipos, y en el que el conjunto británico se terminó quedando con el australiano. 

Criticado, sin resultados positivos, y con más de la mitad de las cien carreras del plan maestro ya disputadas, Rossi debió dejar su cargo como CEO de Alpine en mayo de 2023, y para el GP de Bélgica, también debieron abandonar su puesto Szafnauer, Alan Permane -director deportivo- y Pat Fry -responsable técnico. Y frente a esta ola de despidos masivos, Bruno Famin, un exejecutivo de Peugeot Sport, quedó como jefe interino del equipo. Demasiada inestabilidad para un equipo refundado que apenas cuenta con dos años.

Lo que está por venir     

Es un secreto a voces que el próximo jefe de Alpine será Mattia Binotto, quien ocupó el mismo cargo en Ferrari hasta fines de 2022. Y el italosuizo cuenta con una vasta experiencia en el desarrollo de motores, un déficit grande de Alpine ya que su impulsor cuenta con 30 caballos menos con respecto a otros equipos de la parrilla. De igual manera, el lobby será necesario para encontrar una alternativa al actual congelamiento de motores que está vigente en la Fórmula 1, y que evidentemente perjudica a la escudería francesa.

Ahora resta saber cuánto tiempo demorará el equipo en ensamblar las piezas, y reinventarse para armar un equipo competitivo, ya sea con Gasly, Ocon, o alguna nueva apuesta a futuro. Por estos días, casi todo es una incógnita en Alpine. Y quizás, la única certeza es que recuperarse le llevará tiempo.