Ferrari elogia trabajo de Binotto tras su salida: «Posición fuerte para ser campeones»

Mattia Binotto pagó el precio por los errores sucesivos de Ferrari en la F1 2022, y en la madrugada de este martes, el equipo italiano confirmó su salida como jefe de equipo. De esta forma, la «era Binotto», que transcurrió en las últimas cuatro temporadas, ha terminado, pese a que en Maranello habían negado públicamente la marcha del dirigente después de algunos rumores iniciales.

Según ha anunciado Ferrari, Binotto dejará su puesto el 1 de enero de 2023. Hasta entonces, la escudería italiana no se decidirá por un sustituto -en la prensa internacional se ha especulado con nombres como Frédéric Vasseur, Ross Brawn y Andreas Seidl-, por lo que recién el próximo año se espera que concluya el proceso de elección del nuevo jefe de la estructura.

En su comunicado, el director general de Ferrari, Benedetto Vigna, agradeció a Mattia «su gran contribución a lo largo de 28 años en Ferrari y, en particular, por haber llevado al equipo a una posición de competitividad», luego de haber finalizado segundo en el Mundial de Constructores de 2022.

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«Como resultado, estamos en una posición fuerte para renovar nuestro reto, sobre todo para nuestros increíbles fans de todo el mundo, de ser campeones de la Fórmula 1. Todo el mundo en la Scuderia y en la comunidad Ferrari en general le desea a Mattia lo mejor para el futuro», añadió el CEO.

Binotto se marcha tras su temporada más exitosa al frente de la escudería de Maranello: cuatro victorias y 12 poles en el año. Pero por algunos errores propios y debido a la vigorosa evolución de Red Bull, los italianos perdieron impulso a medida que avanzaba la temporada.

Cabe recordar también que el escándalo técnico de Ferrari en 2019 ocurrió en la gestión de Binotto. Esa temporada, la unidad de potencia parecía imbatible, con una velocidad en línea recta muy superior a la de los demás equipos. Red Bull fue el primero en levantar sospechas de ilegalidad en el motor italiano, dirigiendo sus acusaciones al flujo de combustible.

Mercedes, una parte obviamente interesada, no tardó en unirse a las protestas. La FIA (Federación Internacional del Automóvil) determinó entonces que el sistema de la escudería italiana, que emitía señales eléctricas que interferían con el caudalímetro, era ilegal, con la justificación de que la ventaja obtenida no se ajustaba al reglamento técnico.

Finalmente, el organismo regulador y el equipo de Maranello firmaron una especie de acuerdo secreto. Pero sin la «pimienta» en el motor, Ferrari se enfrentó a fuerte involución técnica en 2020 y 2021. Todo este escenario también pesó en contra de Binotto.

Hay que señalar, además, el descontento de Charles Leclerc con el ahora ex jefe de equipo. La relación entre ambos se ha vuelto conflictiva desde el GP de Gran Bretaña de este año, en el que el piloto de 25 años no logró la victoria tras una mala elección estratégica del equipo, que acabó apartando al monegasco incluso del podio.

En ese momento, Leclerc estaba a 49 puntos de Max Verstappen en la carrera por el título. Poco después compartieron una cena en Montecarlo, pero no fue suficiente para restablecer la relación.