La F1 muestra preocupación por su credibilidad por el techo de gastos

El año pasado, Red Bull recibió un castigo de más de 37 millones de dólares por romper el techo de gasto de la categoría en 2021: el equipo austriaco superó el límite de costos de US$ 145 millones. Además del castigo financiero también recibió un castigo deportivo: perdió el 10% del tiempo en pruebas aerodinámicas para esta temporada.

Esto preocupa a Stefano Domenicali ya que la credibilidad de la F1 para él, es algo que podría ponerse en riesgo si esto sigue ocurriendo. Según sus palabras es necesario que la inspección se haga en el menor tiempo posible.

«Creo que es un punto de atención principalmente porque lo que hemos discutido entre la categoría y los equipos, es que para tener credibilidad para apoyar este tipo de acciones, la aplicación tiene que hacerse más pronto que tarde», dijo en una entrevista con Sky Sports.

«Así que estamos discutiendo eso con la FIA para asegurarnos de que el control y la verificación se haga mucho antes. El castigo si algunos equipos superan el límite máximo tiene que hacerse correctamente y en el menor tiempo posible», siguió.

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El análisis detallado de la FIA mostró que incluso si la información presentada por Red Bull estaba dentro del límite, el equipo dirigido por Christian Horner cometió una infracción de procedimiento al «ajustar o excluir incorrectamente» un coste total de 5,6 millones de libras. Lo que significa que la escudería superó el límite en 1,8 millones de libras, un 1,6%.

Red Bull justificó las cifras y dijo que las cantidades adicionales se redujeron a costes excluidos en 13 áreas de la organización. Esto incluía las contribuciones a las pensiones de los empleados, impuestos, costes de las unidades de potencia y un error de cálculo con Red Bull Powertrains.

Domenicali, sin embargo, reiteró que el límite máximo del gasto -que este año incluso bajó a 135 millones de dólares– fue preacordado con los equipos.

«En primer lugar, no debemos olvidar que el cambio radical en la regulación financiera supuso un cambio también en la gobernanza del deporte. Y estaba p ensando que podríamos tener aún más problemas para gestionar esto, porque el tamaño y la complejidad son realmente enormes», explicó.

«Por supuesto, el debate es muy relevante para que la FIA aborde esto, porque quiero respetar el papel que tenemos. Somos los titulares de los derechos comerciales, ellos son los reguladores, y creo que cuando hablamos de sanciones que, por cierto, se discutieron dentro de los equipos cuando se estaba haciendo el reglamento financiero, siempre será un debate. Así que creo que este año se prestará mucha atención a este tema», concluyó.