Títulos anticipados de Red Bull marcan mal cálculo de la FIA con nuevo reglamento

En un 2022 con un nuevo reglamento de la FIA, que llegó con la intención de equilibrar el poderío de los equipos de la Fórmula 1, Max Verstappen logró este fin de semana, en el GP de Estados Unidos, su séptima victoria en ocho carreras, con lo que igualó el récord de trece triunfos en una misma temporada que ostentan Michael Schumacher y Sebastian Vettel. Y lejos de aquellas previsiones iniciales del ente regulador del deporte motor, la competencia de Austin mostró que el dominio del holandés es tan aplastante que aún puede ganar aún con un grave error del equipo a cuestas.

Consagrado como bicampeón en el pasado GP de Japón, a falta de cuatro carreras para el final de la temporada, Verstappen llegó a Texas con la misma actitud arrolladora de siempre. Y como próximo objetivo, Red Bull esperaba lograr el Mundial de Constructores, un título que le era esquivo a la escudería austríaca desde la temporada 2013.

Así y todo, por lo que se había visto el sábado en el circuito de las Américas, la buena performance de Ferrari en vuelta rápida y la pole position indiscutible de Carlos Sainz, podían llegar a presagiar que Verstappen hubiera tenido que trabajar más de la cuenta para ganar el GP de los Estados Unidos. Sin embargo, la mala largada del español, sumada al toque que recibió por parte de George Russell, le despejó el camino al #1 de Red Bull para cumplir un trámite que parecía de fácil consecución.

¡Conoce el canal de Grande Prêmio en Español en YouTube!
¡Sigue a Grande Prêmio en Español en Twitter y en Instagram!

En el medio, hubo dos neutralizaciones y dos accidentes. Primero, una salida de pista del Alfa Romeo de Valtteri Bottas; y luego un violento accidente en plena recta de Austin, en el que Fernando Alonso voló y golpeó las barreras, mientras que Lance Stroll quedó cruzado a merced de los otros competidores. Más allá de esta fuerte dosis de susto, el dominio de Verstappen parecía imperturbable, dejando a la Ferrari de Charles Leclerc, a la dupla de Mercedes y al Red Bull de Sergio Pérez como candidatos a los restantes lugares del podio. 

No obstante, si algo no se esperaba, era un error en los boxes por parte de la escudería austríaca, que a lo largo de las últimas temporadas, construyó una imagen de infalible y de rapidez a la hora de los pitstops. Esta vez, en la vuelta 36 de un total de 56 en la carrera, una falla en la pistola neumática de la goma delantera izquierda generó una parada de once segundos, por lo que el holandés retrocedió al sexto puesto en la competencia. 

A partir de ahí, Verstappen debió cambiar el chip, y volver a batallar como lo hiciera en cada carrera de la temporada 2021 frente a Lewis Hamilton. Con un buen ritmo, el británico era el líder, y en paralelo, el holandés iba recuperando posiciones poco a poco. A diferencia de otras oportunidades, en la que el dominio de Verstappen era abrumador, esta vez la cuesta arriba fue trabajosa para el piloto de Red Bull,y recién 15 vueltas después pudo ponerse dentro del rango del DRS del Mercedes #44. 

En esta instancia, los ataques y la victoria final del Red Bull #1 hicieron recordar algunos momentos del año pasado, en donde el equilibrio era la base de todo. Sin embargo, esta vez la batalla llegó de manera fortuita, aunque otra vez evidenció que aun con errores a cuestas, Red Bull está varios pasos adelante de sus competidores. Finalmente, este triunfo del holandés -y el cuarto puesto de Sergio Pérez- decretó la consagración de la escudería austríaca en el Mundial de Constructores, que por supuesto, ya estaba definida hace rato, con casi 200 puntos de diferencia por delante de Ferrari.

Con tres carreras por delante, en México, Brasil y Abu Dhabi, resta saber si habrá algún consuelo para Mercedes -que aún busca su primera conquista en 2022- o para la escudería de Maranello, que ganó por última vez en un lejano julio, en el GP de Austria. Incluso, por el lado de Ferrari, un objetivo razonable puede ser el subcampeonato de Leclerc, que supera por apenas dos puntos a Pérez (267 contra 265, muy lejos de los 391 del flamante bicampeón).

A la hora de hacer números, y cuando casi todas las variables están definidas en la F1 2022, quizás el cálculo que estuvo más lejos de la realidad fue el de la FIA, que apostó por un campeonato equilibrado, y recibió, como un golpe de nocaut, un embate de Max Verstappen.