¿Un nuevo Rosberg? Nueva victoria en Azerbaiyán abre una chance para Pérez

Sergio Pérez llegó a Red Bull en 2021. Y justamente a partir del GP de Azerbaiyán de aquel año, el mexicano comenzó a convertirse en un especialista en circuitos callejeros. Hasta este domingo, consiguió cinco victorias más en este tipo de pistas, y esta vez como comandante de un 1-2 de la escudería austríaca, y secundado por el bicampeón Max Verstappen. Este triunfo acerca a Pérez en la lucha por el campeonato frente a su compañero (el duelo está 93 a 87 en favor del holandés), lo que apunta que la disputa por el título puede dirimirse apenas entre los autos #1 y #11.

En la previa del fin de semana de Bakú, la atención completa pasaba por el nuevo formato adoptado por la Fórmula 1 en los fines de semana de carrera sprint. El dominio inicial de Red Bull en las tres primeras carreras pasó momentáneamente a segundo plano, aunque los dos triunfos de Verstappen auguraban un favoritismo para el holandés, que ya había ganado esta misma competencia en 2022.

Ya en pleno fin de semana, los flashes iniciales fueron para Charles Leclerc y su doble pole position -para la carrera principal el viernes y para la sprint para el sábado-, que devolvieron a Ferrari en los primeros planos, al menos, en ritmo a una vuelta. Y ya para la competencia corta, de la mano del buen ritmo de carrera de Red Bull, y mediante una superación sin complicaciones a Leclerc tras partir del segundo puesto, apareció él: Sí, Checo Pérez.

Un fin de semana redondo

Si bien en la clasificación no descolló frente a la superioridad de Ferrari -en parte por un error en el segundo sector de su última vuelta rápida-, Pérez fue el que mejor exprimió el ritmo del RB19 en la carrera sprint de Bakú, que le dio la primera victoria en las competencias cortas de la F1. Verstappen, por su parte, no pudo hacerle frente a Leclerc a pesar de un notorio desgaste de la Ferrari #16 en las últimas vueltas, y terminó tercero.

Así, encaró con buenas perspectivas el domingo, desde donde partió desde el tercer lugar tras su clasificación de viernes. Y ya para esta carrera, contó con dos buenas cartas. La primera fue la suerte, ya que después de llegar al segundo lugar detrás de Verstappen y tras haber superado a Leclerc, un auto de seguridad, provocado por un incidente con Nyck de Vries justo cuando el holandés entraba a boxes, dejó con la punta servida al mexicano. De ahí en más, Pérez solo debió marcar diferencias frente a su compañero de equipo, y aprovechó la otra carta, que es la de una mejor valoración por parte de su equipo, que no lo obligó a ceder la posición como ocurría cuando era un recién llegado a Red Bull.

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El trámite anodino de la carrera no permitió mucho más. La diferencia de 1s2 a 1s5 cuando promediaba la carrera, que se extendió a más de 2s sobre Verstappen, que se quejaba por una pérdida de balance en su RB19, terminaron por sellar la victoria del mexicano en otro circuito callejero. Y tras el 1-2 de Red Bull, Leclerc cerró el podio.

¿Una oportunidad?

No hay margen de duda que Verstappen es un piloto muy completo, veloz y casi sin margen de errores. Y frente a esto, la oportunidad de Pérez recae en su gran desempeño en circuitos callejeros, que lo tienen como un especialista en los últimos años. Así, la proliferación de este tipo de pistas en la Fórmula 1, con próximas carreras en Miami, Mónaco, Singapur y Las Vegas, generan una oportunidad para el mexicano en su sabido deseo de pelear el título frente al vigente bicampeón de la categoría. Cuando el asunto son las calles, las fuerzas en Red Bull se equiparan.

Frente a esta posibilidad, aparece la sombra de Nico Rosberg, aquel piloto alemán que a pesar de tener una jerarquía inferior frente a un ascendente Lewis Hamilton en Mercedes, logró un soñado título en 2016, en base a un buen inicio, a aprovechar las oportunidades, y a plantar batalla frente a su compañero de equipo. Un requerimiento indispensable que tendrá que tener Pérez si aspira a su título en la Fórmula 1. Mal que pueda pesar en Milton Keynes.

Ahora, la próxima parada es Miami, un circuito callejero que puede convertirse en una clave para Pérez. La clave para poder aspirar a la punta del campeonato de la Fórmula 1 y encarrilar su deseo de título, o quedar solamente en un intento.