Aston Martin: Éxito prematuro, presente complicado y futuro incierto en F1 2023

Aston Martin comenzó la temporada 2023 de Fórmula 1 con todas las miradas posadas sobre ellos, porque el equipo británico, en su tercera temporada como constructor dentro de la F1 tras su regreso en 2021, prometía dar que hablar en este nuevo año. Incluso antes de comenzar la temporada empezarían a gestarse grandes expectativas, ya que el equipo anunció la contratación de Fernando Alonso a mediados de 2022, para conformar el binomio de pilotos que conduciría el AMR23 en 2023 junto al canadiense Lance Stroll. La presencia de un piloto como Fernando Alonso, bicampeón mundial de F1 y una de las personalidades más influyentes e importantes de la categoría en los últimos tiempos, posaba sobre el novel equipo todas las miradas, pero también una enorme responsabilidad: debían entregarle al español un coche competitivo, que le permita ubicarse en los puestos de punta y luchar por podios, victorias e inclusive un campeonato. La capacidad técnica del equipo estaba probada, existía solvencia económica y las aptitudes necesarias para luchar por esos primeros puestos en la F1, por lo que las expectativas para con Aston Martin eran elevadas.

En la pretemporada desarrollada en Bahrein, las expectativas nuevamente se encendían al ver el constante protagonismo de Aston Martin en los test, mostrando un gran rendimiento en manos de los dos pilotos titulares y el reserva, Felipe Drugovich. Sin embargo, el gran golpe lo darían en el primer Gran Premio de la temporada, disputado también en el circuito bareiní de Sakhir. Allí, los británicos demostraron que el tan buen ritmo mostrado por el AMR23 no era una casualidad, sino una realidad, logrando el podio con Fernando Alonso, quien finalizó tercero en la carrera y Lance Stroll quedaba en un gran sexto puesto.

Con un coche competitivo y sólido en carrera, conjugado con las estrategias en boxes, Aston Martin se posicionaba como un contendiente real para luchar por victorias y podios, entrometiéndose en ese espacio que suele estar reservado únicamente para gigantes como Red Bull, Mercedes o Ferrari. La escudería verde, en las primeras competencias de la temporada, demostró estar a un nivel incluso superior que los equipos mencionados anteriormente (a excepción de Red Bull).

En los primeros cinco GPs de 2023, Fernando Alonso logró cuatro podios (Bahréin, Arabia Saudita, Australia y Miami), con un cuarto puesto entremedio en Azerbaiyán, mientras que su coequipier Lance Stroll obtuvo tres ubicaciones en el top 10, que incluía un cuarto puesto en Australia y dos abandonos, ocurridos en Jeddah y Mónaco respectivamente. El rendimiento demostrado por AM sorprendió a propios y extraños, ya que no se esperaba que este equipo, en su tercera temporada dentro de la F1 y con el antecedente de obtener dos séptimos puestos en años anteriores con un rendimiento notablemente inferior al mostrado en la primera parte de 2023, se ubicara en puestos tan altos, superando a escuderías con mayor capacidad técnica y económica.

Ante la sorpresiva aparición de Aston Martin en los primeros planos de la Fórmula 1, se encendió la ilusión por ver al equipo triunfar en la categoría, especialmente viéndose esto vislumbrado en los simpatizantes del español Fernando Alonso. Tras muchos años penando con coches que demostraban un rendimiento inferior al esperado, y pese a no dejar de lado su innegable talento y habiendo obtenido podios en su paso anterior por Alpine, existía en esta nueva etapa del ovetense la posibilidad real y concreta de volver al triunfo, ese que le es esquivo desde 2013, cuando competía para Ferrari. La ilusión por el rendimiento de Alonso en Aston Martin fue visible en toda esta primera parte del año, haciendo que gran parte de la atención se focalice en el andar del asturiano y en la expectativa por lograr el 33º triunfo de su trayectoria personal.

Sin embargo, en los últimos GPs antes del receso estival, el rendimiento de Aston Martin ha decaído considerablemente y, poco a poco, pierde esa posición que lo ubicaba como segunda fuerza en la F1 detrás del imbatible Red Bull. Pese a tener presencia constante en el top 10 y buenos resultados por parte de su dupla de pilotos, el ritmo del AMR23 cayó notoriamente, pasando de luchar por triunfos o podios a estar en la pelea por mantenerse dentro de la zona de puntos, cediendo terreno ante equipos como Mercedes, Ferrari o incluso McLaren, quienes, en contraposición a la escuadra de Silverstone, han demostrado una mejoría en cuanto a rendimiento en carrera.

Actualmente, Aston Martin se ubica tercero en el Mundial de Constructores, detrás de Mercedes y el líder Red Bull, acumulando 196 puntos, a razón de 149 unidades para Fernando Alonso, tercero en el campeonato, y 47 por parte de Lance Stroll, noveno en la tabla. Por parte del equipo, en un primer momento negaron la caída en el rendimiento del coche y optaron por enaltecer los resultados obtenidos, hasta que reconocieron las dificultades por las que atravesaban a finales de la primera mitad de año. Se han introducido mejoras y actualizaciones en el auto, las cuales han permitido cumplir los objetivos esenciales puestos por la escudería: puntuar y finalizar las carreras. Para la etapa final del campeonato, Aston Martin buscará mantener el rendimiento e ir recuperando el terreno perdido, volver a los puestos de punta y luchar, nuevamente, por podios y eventualmente, una victoria, que sería la primera para el historial del equipo.

El desempeño del binomio de pilotos tiene distintos matices. Por el lado de Fernando Alonso, la incorporación estelar del equipo, encontramos un conjunto de resultados positivo, con 6 podios en 12 carreras disputadas, tercer puesto en el campeonato de pilotos y una notoria regularidad en cuanto a ritmo de carrera, ya que puntuó en todas las fechas disputadas hasta el momento, además de no contar con deserciones. Por resultados y trayectoria, el asturiano es el primer piloto del equipo y el que ha cosechado la mayor cantidad de puntos en 2023. Se espera que comande en pista a Aston Martin y encabece el resurgimiento del equipo, en su afán de recuperar el rendimiento perdido y redituar los resultados obtenidos a principios de temporada. Por su parte, Lance Stroll, a pesar de su mayor estadía en el equipo, quedó relegado a un rol de segundo piloto ante la presencia de Alonso, y sus resultados son visiblemente inferiores a los obtenidos por su coequipier. Stroll tuvo 8 finalizaciones en top 10 en 10 carreras disputadas, se ubica noveno en el campeonato. El ritmo del canadiense estuvo condicionado por los abandonos y, pese a finalizar en cuarto puesto dos ocasiones, su puesto habitual fue en la parte final del top 10, lejos de lo mostrado por Alonso. Se espera que Stroll acompañe el resurgimiento del equipo, adquiera mayor regularidad y aumente su ritmo de carrera, logrando así mejores resultados.

Aston Martin es una escudería joven y con una proyección ambiciosa para el futuro en Fórmula 1. La llegada de Lawrence Stroll a la dirección de la escudería cambió completamente el panorama para el ex Force India y Racing Point, posicionándolo como un serio contrincante para todos los equipos de F1, con mucho potencial para explotar y beneficiado por el impulso de los confiables y competitivos motores Mercedes. Un inicio estelar de temporada se ve contrastado por una seguidilla de malos resultados que colocan en un futuro incierto la presencia del equipo en los puestos más altos del mundial, pero confían en que podrá revertirse la suerte, recuperar el rendimiento perdido y escalar posiciones hasta ser un permanente protagonista en la lucha por victorias y campeonatos dentro de la Fórmula 1.