Brawn evoca triunfo de Barrichello en lluvia y se lamenta por Norris: “Tragedia”
Ross Brawn, actual director deportivo de la Fórmula 1, lamentó el retraso de Lando Norris que no le permitió ganar el GP de Rusia, y evocó un escenario similar con un trinfo de Rubens Barrichello en 2000.
A veces, en el deporte o en la vida, la diferencia que tiene una actitud ante situaciones bastante similares está simplemente en el resultado. Hace poco más de 21 años, el 30 de julio de 2000, Rubens Barrichello comenzó el GP de Alemania en el puesto 18, se recuperó notablemente a lo largo de la carrera en Hockenheim y estaba en primer lugar cuando llegó la lluvia. En una decisión valiente, decidió permanecer en la pista con neumáticos slicks, incluso contra la determinación de Ferrari. Así, el brasileño conquistó ese domingo su primera victoria en la F1.
En estos tiempos, el 26 de septiembre de 2021, Lando Norris salió desde la pole position por primera vez en su trayectoria en la máxima, lideró una carrera memorable durante 30 vueltas en el GP de Rusia, y cuando llegó la lluvia a Sochi, se arriesgó y se quedó en la pista con neumáticos slicks. Sin embargo, el temporal de lluvia aumentó, y benefició a los que pararon en boxes para poner neumáticos intermedios. Norris sólo se detuvo a dos vueltas del final y terminó séptimo. Como resultado, la joven promesa británica de 21 años no pudo ocultar su tristeza al terminar la competencia, que ganó Lewis Hamilton.
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Protagonista y testigo de ambos acontecimientos, Ross Brawn era el director técnico de Ferrari cuando Barrichello insistió en afrontar la traicionera pista con slicks. El domingo pasado, el ahora director deportivo de la Fórmula 1, vio el drama de Lando Norris desde una posición neutral, aunque no ocultó su tristeza porque su compatriota perdió una gran oportunidad de alcanzar su primera victoria en la F1. «Todos sentimos su dolor cuando salió de pista. Fue una tragedia», describió apesadumbrado el directivo en una columna escrita para el sitio web oficial de la categoría.
«Estuve en esa situación, cuando hay que tomar una gran decisión estratégica. Gané carreras quedándome [en la pista], perdí carreras quedándome. Un buen ejemplo fue cuando Rubens Barrichello ganó el GP de Alemania 2000 para Ferrari. Le insistimos en que viniera a boxes y respondió: ‘De ninguna manera’. Y así resistió y ganó», recordó.
«Estos escenarios son muy difíciles y en Sochi fue especialmente complicado porque sólo la mitad de la pista estaba mojada. Incluso con el radar, nadie estaba seguro de lo que pasaría. Y si estás liderando una carrera, no quieres dejar de hacerlo. Cuando estás adelante, el que va segundo tiene una decisión mucho más fácil de tomar, no tiene nada que perder», destacó el ingeniero británico.
En opinión de Brawn, la inexperiencia pesó sobre Norris cuando tuvo que definir el momento de parar en las últimas vueltas de la carrera.
«Lo vimos el año pasado en Turquía, donde las condiciones eran complicadas. La experiencia cuenta, y lo mismo ocurrió en Rusia. Pilotos como Lewis y Max llegaron y ocuparon los primeros puestos, y la inexperiencia de Lando se reflejó un poco. Pero tomará una mejor decisión la próxima vez que se encuentre en este escenario», comentó.
En última instancia, Brawn entiende que todo forma parte de una curva de aprendizaje dura, pero primordial, que Norris asumirá por lo ocurrido el pasado domingo. «Lando dejará esto atrás y se convertirá en un piloto muy fuerte. Muchas cosas lo preocupaban, incluido el hecho de ser capaz de manejar en clasificación mejor que nadie».
De la misma manera que Barrichello ignoró las llamadas de Ferrari para hacer su parada en boxes cuando la pista estaba mojada en Hockenheim en esa carrera, Norris también ignoró las llamadas de McLaren para hacer su parada en boxes el domingo pasado. Brawn dijo que en ese escenario no hay culpa. «Se podría preguntar: ¿debería su equipo, McLaren, haber tomado la delantera e insistir en que parara en boxes cuando dijo que no quería hacerlo? Un piloto no está en una burbuja. No ve lo que está pasando. En este caso diría que es un 60/40 para el equipo que toma la decisión, pero es muy difícil porque no quieres ceder el liderazgo de la carrera».
«Esa sensación de desmoronamiento que tiene un piloto o un equipo cuando se da cuenta de que ha tomado la decisión equivocada, y de que el liderazgo se evapora ante sus ojos, es horrible. Tienen mi simpatía, pero ese tipo de drama es lo que hace que la Fórmula 1 sea tan grande», dijo el directivo, que alabó la postura de Norris en una situación tan extrema.
«Escucharlo en la radio mientras el equipo hablaba con él, su compostura, era impresionante. Dio un salto en estos últimos años», concluyó.