Brown recuerda escenario «peor de lo que imaginaba» en McLaren: «Ambiente tóxico»

El director ejecutivo de McLaren, Zak Brown, dijo que la situación era «peor de lo que imaginaba» cuando llegó a la escudería de Woking en 2016. Citó un exceso de política, teorías conspirativas y etiquetó el ambiente en la fábrica como «bastante tóxico».

Brown asumió el cargo de consejero delegado tras dos años en McLaren y ayudó a cambiar el panorama dentro de la escudería británica, superando las dificultades derivadas de la pandemia de Covid-19 y devolviendo al equipo a la senda del título de Fórmula 1.

El directivo, sin embargo, recuerda bien cómo era la situación en McLaren cuando llegó y admite que, en aquel momento, los problemas estaban fuera de su «área de experiencia».

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«Fue mucho peor de lo que imaginaba», reveló en una entrevista con el podcast James Allen On F1. «Llegué sabiendo que las cosas no iban bien. Se veía [la falta de] patrocinio en el coche, se veían los resultados. Pero cuando llegué, me di cuenta de que iba realmente mal y nunca había dirigido un equipo de Fórmula 1 antes. Había estado en la F1 toda mi vida. Estaba acostumbrado a una organización de ese tamaño -en la agencia de relaciones públicas de la que venía teníamos unos 1.200 o 1.300-, así que el tamaño no era un problema, pero los departamentos y las competencias estaban definitivamente fuera de mi área de especialización», prosiguió.

«Me ocupé primero de la parte comercial, ya que era donde me sentía más cómodo, y necesitábamos muchos recursos, así que sabía que sería la mayor contribución que podría hacer en poco tiempo», explicó. «Cambié a la mayoría del equipo directivo, pero de uno en uno, a medida que iba conociendo a todo el mundo y echando un vistazo. Era un taller bastante tóxico en lo que respecta a la política y tenía, como Andrea [Stella] lo llama, galletas envenenadas», recordó.

Brown también recordó el cambio de motores Honda a Renault en 2018 y reconoció que, aunque el propulsor japonés fue un aspecto del mediocre rendimiento de McLaren, no fue el único.

«En aquel momento, creo que todo el mundo estaba convencido de que la unidad de potencia era el problema. Y aunque sin duda era un factor importante, no era exclusivamente el problema y eso quedó claro en cuanto cambiamos y los resultados mejoraron un poco. Pero sabíamos que teníamos problemas fundamentales, así que fue una tarea bastante complicada de abordar, pero al final lo conseguimos», comentó.

Sin embargo, el aspecto comercial era sólo el punto de partida. Brown tuvo que cambiar la cultura de McLaren.

«Creo que los mandos intermedios y superiores, no la alta dirección, son fundamentales. Tenemos unas 1.300 personas en McLaren Racing, unas mil en la F1, así que las personas que tienen más influencia en el mayor grupo de personas y son el siguiente nivel de gestión, probablemente contacten con 600 personas en la organización. Es fácil poner un PowerPoint y decir esto es lo que queremos ser, tienes que practicar lo que predicas, pero tienes que asegurarte de que eso ocurre en toda la organización», explicó.

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«Creo que hemos sido muy transparentes dentro de nuestro equipo, eliminando la política del equipo. Al principio tenía una política de puertas abiertas y recuerdo a unos chicos del departamento de divisas que vinieron a decirme: ‘Estamos muy preocupados por ti’. Y yo les dije: «¿Por qué?». No voy a dar nombres, pero vieron a tres personas hablando y [me dijeron]: ‘No es bueno. Creemos que se trata de ti’. Yo dije: ‘Bueno, ¿qué han oído?’ ‘Nada, pero creemos que es malo’. Eran ese tipo de teorías conspirativas que teníamos en el taller. Eran los fantasmas que la gente veía y las teorías conspirativas. Así que eliminamos todo eso del sistema e implantamos una cultura muy transparente y libre de culpas», añadió.

En opinión de Brown, esta nueva cultura fue decisiva para que McLaren se impusiera a Ferrari en el Campeonato de Constructores de 2024.

«Es muy fácil en el deporte y es muy frustrante que si cometes un error -los pilotos cometen errores, de estrategia, de neumáticos, mecánicos- te enfades con la persona y eso es muy poco saludable. Ganamos y perdemos juntos, es un trabajo de equipo, así que creo que ha sido muy saludable para el equipo que las últimas carreras hayan sido realmente difíciles para nosotros», señaló. «Qatar fue obviamente difícil para nosotros. Brasil no fue como nos hubiera gustado. No fuimos competitivos en Las Vegas. Y justo cuando la gente pensaba que lo teníamos todo resuelto, con 14 podios seguidos, tuvimos tres carreras malas antes de la última. Ver al equipo responder con un pit-stop de 2s cuando importaba en Abu Dhabi fue una gran muestra de resistencia por parte del equipo. Creo que este año seremos fuertes», concluyó.

La Fórmula 1 se encuentra de vacaciones y volverá para las pruebas de pretemporada, previstas en Bahréin entre el 26 y el 28 de febrero. La temporada 2025 comienza con el Gran Premio de Australia, del 14 al 16 de marzo.