El Circuito de las Américas se renueva antes de la F1 para suavizar las ondulaciones
A pesar del nuevo asfalto, se trata de una solución temporal, ya que el gran problema es el tipo de suelo sobre el que se construyó la pista de Austin.
Próximo escenario a albergar la Fórmula 1 en la temporada 2024, el Circuito de las Américas (COTA), en Austin (Estados Unidos), se sometió a un nuevo proceso de reasfaltado que concluyó a finales de agosto. Se espera así que la medida ayude a mejorar el constante problema de las ondulaciones, siempre criticadas por los pilotos.
Para hacerse una idea de lo crítico del asunto, el año pasado Lewis Hamilton y Charles Leclerc, segundo y sexto respectivamente en el Gran Premio de Estados Unidos 2023, fueron descalificados por irregularidades en las tarimas, que deben tener un grosor de 10 mm y su desgaste máximo en carrera no debe superar 1 mm.
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Esto se debe al proceso de roce de la madera con el asfalto durante las carreras, especialmente en un circuito ondulado como el de Texas. En abril de este año, antes del Gran Premio de las Américas de MotoGP, COTA comenzó un proyecto adicional de reasfaltado, ya que el último se había realizado en 2021, y se concentró entre las curvas 2 y 10 y 12 y 16.
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Se utilizaron más de 18.000 toneladas de asfalto, especialmente en el sector 1. Las obras finalizaron en agosto, antes del regreso del Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) a la pista. El presidente del Circuito de las Américas, Bobby Epstein, declaró que espera carreras de F1 más tranquilas y mejores tiempos por vuelta, aunque la pista pueda perder «un poco de su carácter».
La principal complicación del COTA es su ubicación. La pista se construyó sobre un terreno formado por «arcilla muy plástica», lo que significa que el suelo es especialmente susceptible a las variaciones de temperatura y puede crecer, encogerse y ondularse. En realidad, se trata de un problema bastante común en la región de Texas.
El reasfaltado, por tanto, es una solución temporal. La única forma de resolver completamente el problema es retirar completamente la calzada y reconstruirla con este tipo de suelo susceptible a la hinchazón estacional. Sin embargo, esto no sólo supondría más tiempo, sino también una inversión económica que obligaría a cerrar Austin todo el año, algo que está fuera de toda discusión.
La Fórmula 1 se toma ahora un descanso de tres semanas, para volver a las pistas entre el 18 y el 20 de octubre con el GP de Estados Unidos en el Circuito de las Américas, en Austin, Texas.