Ferrari presenta la SF-24 para la F1 2024 con la adición de líneas en blanco y amarillo
Ferrari se convirtió en el séptimo equipo en lanzar su monoplaza para la temporada 2024 de la Fórmula 1. Y en su decoración, la flamante SF-24 cuenta el rojo tradicional, aunque con la incorporación de líneas blancas y amarillas.
Ferrari reveló este martes al mundo la SF-24, la máquina con la que pretende competir por el título mundial de Fórmula 1 esta temporada. Luciendo su tradicional color rojo, la escudería mostró un coche de líneas depuradas y diseño revisado respecto al monoplaza del año pasado. Se trata del primer auto construido bajo la batuta del «maestro» Frédéric Vasseur, que intenta sacar a la escudería italiana de una incómoda racha negativa de campeonatos.
Por eso, la icónica marca de Maranello no ha escatimado en titulares en este inicio de año y, aunque hay mucho entusiasmo en torno al nuevo proyecto, la atención también está dividida entre la esperada llegada de Lewis Hamilton en 2025.
Incluso antes de la presentación, Ferrari adelantó la librea de los coches desvelando el fin de semana los monos de los pilotos, coloreados en amarillo y blanco. El SF-24 sigue esta pauta, con un rojo predominante, sin tanto lugar para la fibra de carbono como adoptó gran parte de la parrilla, y con la adición de líneas blancas y amarillas. La presentación fue bastante escueta, con un video de no más de tres minutos y sin la presencia de los pilotos, a diferencia del pomposo lanzamiento de 2023 que se llevó a cabo en la pista de Fiorano.
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El nuevo coche de Ferrari lleva la firma de Enrico Cardile, responsable del chasis; Diego Tondi, jefe de aerodinámica; y Enrico Gualtieri, que dirige el departamento de motores de los italianos. Rory Byrne también ha participado en la concepción del proyecto como asesor.
Pero hasta que el siete veces campeón aterrice en suelo italiano, el equipo más veterano de la parrilla tiene puestas sus esperanzas en Charles Leclerc y Carlos Sainz. El primero goza de la plena confianza de la dirección de Ferrari. Tanto es así que acaba de renovar su contrato por varios años. Es decir, el deseo es contar con el monegasco también para la entrada de la nueva reglamentación en 2026, además del objetivo de intentar el título antes.
Llevando en el equipo desde 2019, la principal característica de Leclerc es su velocidad en una sola vuelta. Hoy es quizá el más rápido de la parrilla. El año pasado, aunque no ganó, el dueño del coche #16 logró cinco poles en un campeonato dominado en gran medida por Max Verstappen. A pesar del difícil comienzo, Charles fue capaz de firmar actuaciones más sólidas en la segunda mitad de la temporada, cuando Ferrari también dio un salto de calidad. El piloto terminó quinto en el Mundial de Pilotos, por detrás de Verstappen, Sergio Pérez, Hamilton y Fernando Alonso.
Sainz, por su parte, entra en 2024 sabiendo que está fuera de Ferrari, debido al acuerdo entre el equipo y el multicampeón Mercedes. Aun así, debería desempeñar un papel importante, ya que tiene una buena lectura de la carrera y entiende cómo funciona la escudería italiana. Uno de sus puntos fuertes es su conducción cerebral y sólida. No en vano, la única victoria de los Ferrari en 2023 la consiguió él en Singapur, cuando rompió la hegemonía de Red Bull.
En este sentido, hay que decir que Ferrari estuvo cerca de los austríacos en varios momentos de la temporada, pero aun así tuvieron un año de altibajos. En primer lugar, por el cambio de gestión, cuando los directivos de la marca optaron por despedir a Mattia Binotto. Vasseur asumió el cargo en enero y se dispuso a promover una potente reestructuración técnica en la fábrica, destituyendo a nombres como Laurent Mekies y promoviendo a otros muchos, como Diego Ioverno, un veterano de 23 años en diferentes funciones dentro de la compañía, que asumió el cargo de director técnico del equipo.
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A partir de entonces, el directivo francés se centró en la ingeniería y la aerodinámica. El objetivo era trabajar en actualizaciones constantes a lo largo del año, especialmente para eliminar dos grandes deficiencias: el ritmo de carrera y el excesivo desgaste de los neumáticos. La velocidad pura nunca faltó en los coches rojos, siendo el rendimiento en clasificación la mejor arma de la Scuderia. Y a pesar de la enorme actuación en el Gran Premio de Italia y la contundente victoria en Singapur, el equipo italiano no vio una mejora significativa de sus puntos débiles hasta la parte final del campeonato.
El salto de rendimiento fue tan sólido que Ferrari pudo alcanzar a Mercedes, que se mantuvo en la segunda posición del Mundial de Constructores durante casi todo el año. Para hacerse una idea, al final de la primera mitad de la temporada, los italianos sólo eran cuartos en la tabla, a 56 puntos de los alemanes, que eran escoltas. En la competencia final, en Abu Dhabi, la diferencia se redujo a sólo tres unidades, tras una lucha mano a mano.
De ahí parte Ferrari en 2024, invirtiendo en un proyecto maduro y en un mejor conocimiento de su potencial.
La Fórmula 1 retornará a la pista entre el 21 y el 23 de febrero, con la pretemporada en Bahréin, en el circuito de Sakhir.