Ferrari firma preacuerdo con F1 por motores de 2026 y evita chance de vetar a Red Bull

Desde finales de 2022 ya se sabía que Ferrari tenía reticencias respecto a las reglas propuestas para el diseño de los motores que tendrá la Fórmula 1 a partir de 2026. Sobre todo, frente a los planes de Red Bull para involucrarse como fabricante de unidades de potencia -las actuales que utiliza siguen siendo de Honda– a través de RB Powertrains. Sin embargo, la empresa italiana cedió momentáneamente y firmó un preacuerdo con Liberty Media, promotora de la categoría, para avanzar en las conversaciones.

La información procede del diario italiano Corriere dello Sport. Según el medio, Ferrari estaba en soledad frente a las impugnaciones hacia Red Bull, por lo que tuvo que ceder. A pesar de parecer una batalla política perdida, el periódico asegura que la bandera blanca se ofreció debido a que Ferrari recibió concesiones en otros puntos del acuerdo a los que se oponía.

Esto se produce aproximadamente un mes después de que los italianos ni siquiera fueran invitados a una reunión sobre los motores de 2026 celebrada en diciembre, ya que no habían aceptado el borrador de la reunión anterior. Se temía que los italianos ejercieran su temido derecho de veto sobre el acuerdo, pero eso quedó descartado.

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Con esto, Red Bull Powertrains se acerca a convertirse oficialmente en nuevo constructor de motores para 2026, algo que permitirá más tiempo de pruebas para el desarrollo y 25 millones de dólares para gastar en el desarrollo durante tres años.

La versión italiana de Motorsport.com aporta un dato que se suma a la confirmación del preacuerdo: que ningún directivo de Ferrari se mostró demasiado molesto por seguir adelante con el pacto. La razón fue que, por miedo a que se ejerciera el poder de veto y estallara un conflicto público en el desarrollo de las normas en un momento en el que llegan nuevas fábricas a la F1 y otras se interesan, Liberty hizo importantes concesiones.

Aunque ningún medio sabe exactamente cuáles fueron las peticiones de Ferrari que formaron parte de la negociación, una de ellas está relacionada con la construcción de piezas del motor, como la tapa de cilindros y el carter. Audi había pedido que la F1 abandone la producción en 3D y los fabricantes vuelvan a utilizar piezas de fundición, pero Ferrari está empezando a avanzar hacia la tecnología de impresión en 3D incluso para autos de calle, por lo que se puso en contra. De acá a 2026, muchos rounds más vendrán este los gigantes de la Fórmula 1.