FIA dice que equipos «querían sangre» y ve sanción justa a Red Bull: «Hubo equilibrio»

Red Bull arrasó por completo en la temporada 2022 de Fórmula 1, ganando tanto el Campeonato de Pilotos como el de Constructores, pero no dejó de vivir una gran polémica: la sanción recibida por superar el tope presupuestario de la categoría en 2021. La noticia saltó en el GP de Singapur, en octubre, y se prolongó hasta que la FIA determinó una multa y una reducción del 10 % en el tiempo del túnel de viento del equipo en 2023.

El presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, comentó sobre la decisión de la FIA y destacó el hecho de que Red Bull fue el primer equipo en ser sancionado, en un sistema relativamente nuevo que aún no había sido probado.

“Hemos aprendido mucho y tenemos una gran evaluación sobre esto. ¿Quién sabía cuál sería el resultado en el primer año? Ni siquiera esperábamos eso”, admitió Ben Sulayem al portal Autosport. “Si miras a los otros equipos, dirán que éramos suaves. Sobre la sanción, algunos querían que los colgaran [a Red Bull], querían ver sangre», admitió.

¡Conoce el canal de Grande Prêmio en Español en YouTube!
¡Sigue a Grande Prêmio en Español en Twitter y en Instagram!

Además del error por parte de Red Bull, los demás equipos de la parrilla naturalmente iniciaron un proceso de presión sobre la FIA, para que el castigo para los taurinos -que dominó el campeonato en 2022- fuera ejemplar.

Según Ben Sulayem, es necesario encontrar el término medio para que la pena no sea demasiado pesada. Además, el presidente ve la necesidad de iniciar el proceso de investigación con un mayor plazo de tiempo, evitando que la polémica se alargue hasta la parte final del campeonato.

“Los equipos sancionados, a su vez, ven las sanciones como algo pesado. Después, ¿en qué punto trazas la línea que la divide?”, preguntó. “Quiero decir, también tenemos que ser justos. ¿Queremos deshacernos de ellos o queremos que lo corrijan y no repitan esto?», puntualizó.

“Lo único que diría es: lo que hicimos en septiembre y octubre debería haberse hecho antes”, admitió. “Pero como estamos en el primer año, aprendimos mucho de eso. Y todavía estamos aprendiendo. Hubiera sido mejor haber hecho esto en mayo, no en octubre”, reconoció.

Finalmente, el presidente de la FIA admitió que cuidar las finanzas de los equipos es un proceso agotador, que lleva tiempo, y advirtió que la entidad hará nuevas contrataciones para el próximo año. El objetivo, según él, es tener un equipo al tanto de todo lo que sucede con los gastos de los equipos, para que el proceso sea menos lento y más transparente a partir de 2023.

“Fue el primer año de las reglas financieras, cuidar eso es muy difícil”, señaló. “Y es por eso que hablamos de nuevos empleados: tres para el aspecto financiero y tres para el chasis y la unidad de potencia. Así que tendremos nuevas contrataciones en el futuro. Si no tienes la mano de obra y la gente para controlarlo, ¿cuál es el significado de tener las reglas? Creo que hubo un equilibrio entre el aspecto económico y el deportivo en las sanciones”, concluyó.