FIA prohíbe manifestaciones políticas y religiosas sin aprobación previa desde 2023

¿Mensajes de apoyo a causas medioambientales y sociales, como el apoyo a la comunidad LGBTQIA+, en los cascos de los pilotos durante las carreras? Ahora, solo si la FIA lo quiere. La entidad que gestiona el deporte ha actualizado el Código Deportivo Internacional para la temporada 2023 y solo permitirá demostraciones que estén previamente aprobadas.

La regla se aplica a todas las categorías que están homologadas por la FIA, incluida la Fórmula 1. A partir de ahora, el organismo regulador quiere estar al tanto de lo que un determinado piloto o equipo pretende pintar en cascos, coches e incluso camisetas para luego emitir una aprobación oficial por escrito. Solo con dicha autorización, tales protestas pueden llevarse a cabo durante los fines de semana de carreras.

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El texto del artículo 12.2.1 dice que “la realización y exhibición general de declaraciones o comentarios políticos, religiosos y personales que sean claramente contrarias al principio general de neutralidad promovido por la FIA en sus estatutos, salvo aprobación previa por escrito por la FIA a competiciones internacionales o por la ASN (Autoridad Deportiva Nacional), para competiciones internacionales dentro de su jurisdicción”, constituye una violación de las reglas.

La censura en la F1 ya había dado aires de gracia poco después de que Lewis Hamilton subiera al podio del GP de Toscana 2020 vistiendo una camiseta negra con las palabras “Arresten a los policías que mataron a Breonna Taylor”, una joven de 26 años estadounidense que fue asesinada a tiros después de que la policía allanara su casa en medio de la noche como parte de una investigación sobre su exnovio. Breonna se convirtió en uno de los símbolos del movimiento Black Lives Matter, movimiento que se expandió en todo el mundo tras otro brutal asesinato de una persona negra en Estados Unidos, George Floyd, también por violencia policial. Tras ello, Hamilton no lo pensó dos veces sobre su uso y la visibilidad que tiene para exigir justicia.

A la entidad, sin embargo, no le gustó nada la actitud del siete veces campeón y decidió prohibir a los pilotos llevar camisetas sobre los monos. “A lo largo de la ceremonia del podio y los procedimientos de entrevista posteriores a la carrera, los pilotos que terminan primero, segundo y tercero deben permanecer vestidos solo con sus monos, cerrados al podio, no abiertos hasta la cintura”, señaló la determinación de la FIA.

Las manifestaciones, sin embargo, nunca abandonaron el paddock, la mayoría de las veces encabezadas por Hamilton y Sebastian Vettel. En varias ocasiones, el ahora ex piloto desfiló los fines de semana de GP con camisetas protestando por la crisis climática mundial, como en el GP de Canadá, cuando vestía una camiseta con la frase “Dejen de minar arenas bituminosas” y despertó la ira de las autoridades locales.

El tetracampeón también se ha convertido en una voz activa por los derechos de la comunidad LGBTQIA+, esto último, no por casualidad, ya que el calendario de la F1 pasa por países donde los homosexuales son perseguidos e incluso condenados a muerte, como en Qatar. La postura de Vettel, por cierto, molestó al presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem.

“A Niki Lauda y Alain Prost solo les importaba conducir. Ahora Vettel monta una bicicleta arcoíris, Lewis es un apasionado de los derechos humanos y Norris habla de salud mental. Todo el mundo tiene derecho a pensar. Para mí, es una cuestión de si debemos imponer nuestras creencias todo el tiempo en algo que no sea el deporte», declaró el líder este año al portal web británico GrandPrix247. Las declaraciones, sin embargo, resonaron mal, y Sulayem se vio obligado a cambiar su tono, diciendo que la diversidad siempre ha estado en su agenda de gobierno ante la FIA.