El jefe de Mercedes cita a Einstein y cuestiona métodos de trabajo: «¿Sigo siendo el mismo?»
Tras unos años difíciles y unos resultados decepcionantes, Toto Wolff admitió que tenía que adoptar una nueva forma de tratar a la gente en Mercedes. E incluso citó a Albert Einstein para explicar el cambio de actitud.
Atravesando un momento difícil con Mercedes en la Fórmula 1, el jefe del equipo, Toto Wolff, reflexionó sobre los últimos años y habló de la nueva actitud que tuvo que adoptar para convertirse en un mejor líder dentro de las Flechas Plateadas. Incluso cuestionó su propia capacidad para estar al mando y admitió que «molestaba a mucha gente» con sus maneras.
Después de dominar la categoría reina del automovilismo durante casi una década ganando ocho títulos del Mundial de Constructores entre 2014 y 2021, la escudería de Brackley sufrió un terrible revés cuando entró en vigor hace casi tres años el reglamento actual, que trajo de vuelta el efecto suelo. En 2022 intentó innovar con el concepto ‘zero-pod’ del W13, pero fracasó y se vio obligada a seguir un camino diferente a partir del Gran Premio de Mónaco de 2023, cuando presentó un modelo más ‘tradicional’ en el W14.
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A pesar de ganar tres carreras en el actual campeonato, en Austria, Inglaterra y Bélgica, Mercedes nunca ha sido un serio aspirante al título. Actualmente ocupa el cuarto puesto de la competición, con 382 puntos, y está a 162 puntos de Red Bull, que se mantiene en el tercer puesto. La distancia con el líder McLaren es aún mayor, ya que 211 puntos separan a sus rivales en la tabla.
Los decepcionantes resultados plantearon dudas tanto a nivel externo como interno. El propio Wolff, que lleva al frente del equipo desde 2013, reconoció que tenía que encontrar algunas respuestas a lo que estaba haciendo y, en consecuencia, tuvo que cambiar su forma de gestionar la escudería alemana.
«¿Sigo siendo el mismo líder que era antes? ¿He pasado de ‘genial’ a ‘bueno’? Porque ‘bueno’ no es suficiente en la Fórmula 1. Estas son preguntas a las que necesitaba encontrar respuesta, y lo hice», declaró en una entrevista con el podcast High Performance. «Cambié a nivel de personalidad. La presión siempre ha sido una herramienta útil que he utilizado para trabajar en mí mismo, pero en los demás no ha dado resultados. Al contrario: irritaba a personas que realmente daban lo mejor de sí mismas, y daban lo mejor de sí mismas para nuestro éxito. Así que tuve que cambiar esa perspectiva», explicó.
«Por ejemplo, el año pasado tuvimos una buena carrera en Austin en términos de rendimiento. Quedamos segundos y luego nos descalificaron por una irregularidad en el suelo. Pero aun así me quedé satisfecho, porque fuimos rápidos», recordó. «Luego fuimos a Brasil, pero fracasamos estrepitosamente. Estaba muy enfadado conmigo mismo y con el equipo, y expresé ese sentimiento diciendo que aquel coche no merecía ganar ni una carrera», prosiguió.
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«Al decir eso, estaba faltando al respeto a todo el trabajo que la gente hacía cada día para intentar hacer ese coche más rápido. Y enfadé a algunas personas», lamentó el jefe de Mercedes.
Wolff citó entonces los atributos del equipo y dijo que tenían las herramientas necesarias para dar la vuelta a la situación y volver a ser competitivos, aunque al final no lo consiguieran. Reconociendo la derrota ante Red Bull en los últimos años, incluso citó al famoso físico teórico alemán Albert Einstein al filosofar sobre el cambio de actitud.
«Teníamos todo lo que un equipo necesita: los mejores pilotos, un proveedor de motores que tenía el presupuesto y el personal para estar al más alto nivel, infraestructura, recursos financieros, liderazgo, gestión de competencias de alto nivel, creatividad e innovación. Sin embargo, fuimos derrotados por un equipo formidable y nos dimos cuenta de que a veces hay que cambiar las cosas», afirmó.
«Puede que los métodos que antes funcionaban ya no lo hagan. Y como dijo Einstein, hacer lo mismo una y otra vez y esperar que cambien los resultados nunca será la solución», concluyó.
La Fórmula 1 vuelve a la pista para el Gran Premio de Las Vegas, en Estados Unidos, del 21 al 24 de noviembre. Después tendrá carreras en Qatar, el último sprint del año, y Abu Dhabi.