Jornada en Singapur acerca al trío de hierro, pero es pronto para hablar de choque directo

Al ser Marina Bay un circuito de naturaleza muy particular, con sus 23 curvas, algunas de ellas muy cerradas, la primera jornada de entrenamientos del GP de Singapur de Fórmula 1 ha dibujado una batalla mucho más cerrada entre los tres primeros equipos de la parrilla. Esto se debe a que el trazado urbano exige no sólo una configuración que favorezca la carga aerodinámica y un control consciente de los saltos, sino también una posición de salida fuerte: no es fácil adelantar, y este elemento se acentúa aún más con la nueva puesta a punto de los coches, con neumáticos más grandes. Así, este viernes parece algo inconcluso, ya que los equipos intentaron pensar más en el sábado que en el domingo.

Y esa percepción proviene del hecho de que todos se enfrentaron a algún tipo de preocupación a lo largo de las dos sesiones, contratiempos que iban desde problemas mecánicos hasta intentos fallidos de vuelta limpia, especialmente en la segunda actividad del programa. Según todos los indicios, Ferrari fue capaz de limitar los daños y seguir liderando la acción, pero eso no los convierte en favoritos, al menos no inmediatamente, aunque Carlos Sainz cerró el día con un mejor tiempo de 1min42s587, 0s2 mejor que su compañero de equipo Charles Leclerc.

Resulta que los italianos tuvieron trabajo en los garajes. El equipo de Maranello había planeado actualizaciones para la carrera de Singapur, pero optó por echarse atrás. Además, el monegasco perdió mucho tiempo en los FP2 con el coche parado en boxes, mientras los mecánicos retocaban el suelo, los frenos y la suspensión. Cuando finalmente salió a la pista, Charles consiguió un tiempo de vuelta interesante, pero no lo suficiente para liderar. En cualquier caso, el subcampeón del mundo salió del SF-75 más confiado para la clasificación que para el domingo, lo que corrobora la elección que hizo Ferrari para la ronda de este fin de semana, y que ha hecho con cierta frecuencia en 2022, pero que puede marcar más la diferencia ahora.

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«Nunca es ideal perder tanto tiempo en una pista de calle. Cuantas más vueltas des, más rápido serás. Pero, de nuevo, no estoy demasiado preocupado. No ha sido un día perfecto, pero estoy seguro de que mañana recuperaremos ese terreno en la TL3», dijo Charles.

«Creo que hoy no hemos podido simular el ritmo de la carrera. De todos modos, la calificación aquí es muy importante. Nuestro rendimiento en una sola vuelta es muy fuerte. Todavía no tenemos ni idea del rendimiento de la carrera. Pero lo daremos todo y aspiraremos a la pole», añadió.

Líder del día, Sainz confirmó el escenario presentado por su compañero, pero entiende que Ferrari tendrá una lucha más dura en la clasificación. «Todavía tenemos que ver algunas cosas, creo que seis coches lucharán delante. Nos sentimos más cómodos en los FP2, pero aún no hemos llegado al punto que nos gustaría. Se necesita mucha confianza para encajar una buena vuelta aquí y todavía no estamos totalmente satisfechos. Tengo espacio para crecer también en mi rendimiento, para acercarme a la pared. Red Bull y otros equipos han tenido problemas y seguro que mañana evolucionarán, creo que Red Bull, Ferrari y Mercedes crecerán mañana», analizó el español.

Sainz tiene razón al proyectar un crecimiento de los rivales este sábado, especialmente de los austríacos. Una de las cosas más llamativas de 2022 es la capacidad de adaptación de Red Bull incluso en escenarios que no les favorecen. El trazado urbano de Singapur no es realmente el mejor para el RB18, sin embargo, no se puede subestimar la escudería de los energéticos. También pesa el hecho de que el equipo de Christian Horner haya tenido un viernes complicado, marcado por problemas técnicos y mecánicos en ambos coches, así como un duro trabajo de puesta a punto, buscando un delicado compromiso entre la clasificación y el ritmo de carrera.

Sergio Pérez tuvo más contratiempos y también sufrió en las calles de Marina Bay. El mexicano sólo fue noveno en los FP2, con sólo 13 vueltas completadas. Obviamente, no es ‘Checo’ el mejor indicador de Red Bull, ese papel, por supuesto, es de Max Verstappen. Celebrando su 25º cumpleaños, el holandés se mostró competitivo en los primeros entrenamientos del día, terminando a poco más de una décima de Lewis Hamilton, mostrando una puesta a punto consistente. Sin embargo, en la segunda sesión, cuando se empezó a trabajar en la puesta a punto, las cosas no salieron como quería el taurino. Aun así, el casi bicampeón marcó el cuarto mejor tiempo en medio de una agitada sesión final. También, al igual que Ferrari, Red Bull no tiene datos más precisos sobre el ritmo de carrera: Max también pasó mucho tiempo en boxes y sólo completó ocho vueltas.

«Creo que empezamos muy bien en los TL1, el coche funcionaba según lo que queríamos. En los TL2, optamos por probar algunas cosas, pero tardaron en cambiarse en primer lugar, así que probamos algo nuevo, que también tardó. Así que no pudimos conducir mucho. Lo que mostramos en los TL2 no es representativo (del rendimiento), pero por supuesto, todavía hay mucho margen de mejora», analizó Verstappen, que también puso la posición de salida como un factor determinante.

«Aquí, lo más importante es ser rápido a ritmo de vuelta. Analizaremos muchas cosas, hicimos una larga secuencia en los TL1. No creo que sea el fin del mundo», añadió el dueño del #1.

Verstappen nunca ha ganado en Singapur, pero está muy cerca de conseguir el campeonato este fin de semana. El piloto necesita una combinación de resultados, además de la victoria del domingo.

Ese primer pelotón de la F1 en Marina Bay lo completa Mercedes. Es sabido que el coche plateado prefiere los circuitos con más curvas que las rectas, y ese es el caso de Singapur. El problema radica en la ondulación de los trazados callejeros: Mónaco y Azerbaiyán siguen en la imaginación de los mercedistas. Por lo tanto, los ingenieros optaron por una configuración con un pequeño elevador en el suelo, con el fin de suavizar los rebotes – sí, volvieron con fuerza, y no fueron sólo los alemanes los que sufrieron. Y este efecto hizo que la FIA (Federación Internacional del Automóvil) cambiara la directiva técnica para relajar las indicaciones sobre la oscilación vertical de los autos. Aun así, los hombres de Toto Wolff tuvieron mucho trabajo.  

Lewis Hamilton lideró los primeros entrenamientos y sintió que la puesta a punto iba en la dirección correcta. En los FP2, esa sensación cambió, ya que el equipo también tuvo que reevaluar las condiciones meteorológicas y del circuito. «Fue más o menos como cualquier otro fin de semana, diría yo. El coche está como está, saltando como un loco. No parece que hayamos progresado inmensamente aquí, todavía estamos a 1s de distancia o algo así. Pero seguiremos trabajando», comentó el heptacampeón.

«No hay mucho que hacer con los rebotes, es lo que hay. En cuanto a la puesta a punto, creo que George (Russell) fue capaz de encontrar más tiempo por vuelta. Por mi parte, también puedo encontrar más tiempo, sólo que no pude conseguir una vuelta limpia, y creo que mi configuración me hizo frenar mucho. Pero lo arreglaremos esta noche e intentaremos hacerlo lo mejor posible mañana», continuó.

De hecho, George Russell fue el tercero más rápido del día, mientras que Lewis terminó quinto -Verstappen estuvo entre los coches de plata-.

A fin de cuentas, el trío de hierro tiene potencial para crecer, pero en direcciones diferentes. Sólo que, tal y como estuvo este viernes, incierto, aún es demasiado pronto para prever un enfrentamiento directo el domingo.

GRANDE PRÊMIO sigue todas las actividades del GP de Singapur de Fórmula 1. El sábado, los Libres 3 están programados para las 18:00 horas [local, GMT+8], mientras que la clasificación comienza a las 21:00 horas.

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