Mercedes cede y confirma cambios en el diseño del coche para 2023: «ADN diferente»

Mercedes apostó por un proyecto extremo para el primer año bajo la nueva normativa de la F1 y el regreso del efecto suelo, pero tuvo muchos problemas a lo largo de 2022, vio rota su hegemonía en la era híbrida por su rival Red Bull y ahora piensa en 2023.

Mercedes vio oficialmente rota su hegemonía el pasado domingo, con la victoria de Max Verstappen en el GP de Estados Unidos y, en consecuencia, el título de Constructores de Red Bull, que ya le hace pensar en 2023. Todavía en busca de ganar al menos una carrera en la temporada 2022 de Fórmula 1, el equipo no oculta que ya está centrado en el trabajo para el próximo año, y Toto Wolff confirmó que el próximo coche será visualmente diferente.

La escudería alemana apostó por un diseño atrevido con el cambio de reglamento para 2022. Una innovación aerodinámica, con un lateral estrecho y unas vainas laterales verticales (las tomas de aire) -los ‘zeropods’, como se le empezó a llamar-. Sin embargo, en las primeras pruebas de pretemporada, las Flechas de Plata se vieron sorprendidas por un fenómeno que le dio un dolor de cabeza sin precedentes. El porpoising, los rebotes derivados del retorno del efecto suelo.

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El W13 de George Russell y sus entradas de aire verticales: el concepto de Mercedes cambiará para 2023 (Foto: Mercedes)

A causa de los rebotes, Mercedes vio cómo el W13 perdía contra el F1-75 y el RB18, los modelos de los principales rivales, Ferrari y Red Bull, respectivamente. Siempre se cuestionó si el concepto adoptado para 2022 no era el culpable, precisamente porque la disposición dejaba el suelo más expuesto. No obstante, Wolff y compañía afirmaron que el coche tenía potencial y que no abandonarían el proyecto. 19 carreras después, el equipo de Brackley finalmente se rindió.

«Creo que el ADN del coche cambiará para el próximo año, eso está claro», dijo Wolff a la prensa en Austin. «No significa necesariamente que la carrocería vaya a ser muy diferente, pero ciertamente eso forma parte del ADN del coche. La arquitectura cambiará para el próximo año», añadió.

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La posición de tercera fuerza en la F1, sin embargo, creó una situación que podría ser crucial en ese intento de volver a la cima. Por reglamento, tendrá un 14% más de tiempo en el túnel de viento que Red Bull, y esa es la apuesta de Wolff.

«A lo largo de 2021, fuimos el equipo que lideró y ganó el Mundial de Constructores. Así que hasta mediados de este año, hemos tenido un 7% menos de tiempo en el túnel de viento en estos últimos 18 meses que Red Bull e incluso menos que Ferrari», señaló el austriaco.

«En 2023 será lo contrario, tendremos un 14% más si terminamos terceros [sobre Red Bull]. Así que ese tiempo extra es exactamente para lo que se creó el reglamento, para dar posibilidades a los que pierden la ventaja de recuperarla», finalizó el jefe de Mercedes.