Norris se queja de las limitaciones conductivas del MCL60: «Tengo que adaptarme»

A pesar de que McLaren ha hecho podios en las últimas carreras de la F1 2023, como en Gran Bretaña y Hungría, para Lando Norris el coche está muy lejos de poder ser el ideal. Es que el MCL60 no se adapta a su estilo de manejo, y es él quien debe modificar la forma en la que conduce el vehículo, algo que también ha tenido que hacer su compañero, Oscar Piastri.

El piloto del auto #4 dijo que el principal problema del coche en la actualidad es su falta de velocidad en las curvas, lo que le impide rodar en una pista más limpia. Pero la falta de versatilidad a la hora de pilotar en diferentes condiciones también lastra el rendimiento.

«No es sólo mi gusto, sino también el de Oscar, porque tenemos opiniones muy parecidas», comenzó diciendo Norris a la prensa. «Al igual que el año pasado cuando conducía Daniel [Ricciardo], teníamos muchas opiniones similares cada día, cada fin de semana», añadió.

«Es difícil de describir. Tienes que conducirlo totalmente de una manera. Pero también es una forma que no quiero o no me gusta conducir. No me gusta conducir el coche como tengo que hacerlo ahora. Siento que no está en absoluto a mi altura», subrayó Lando, a quien le gustaría «poder tener la velocidad mínima para hacer un giro en U».

«Lo último que puedo hacer hoy es eso. Tengo que hacer giros en ‘V’ más que nada, y nunca he sido un gran fan de eso. No lo disfruto tanto», añadió Norris.

Como nota positiva, el #4 destacó que el MCL60 es un coche al que «le gusta ir en línea recta», lo que no significa que ese sea su punto fuerte. «¡Tampoco es muy rápido en las rectas! Pero somos buenos en las frenadas, en las rectas, y por eso a veces éramos tan rápidos en mojado», continuó.

De hecho, McLaren tuvo una buena actuación en el sprint belga, con Piastri casi consiguiendo la pole y completando la corta carrera en segunda posición tras un buen ritmo bajo la lluvia. Norris dijo, sin embargo, que el coche tiende a ser mejor en esas condiciones cuando los frenos son un diferencial, como en Mónaco, porque aumenta la temperatura de los neumáticos.

«Ahí es cuando somos rápidos, pero en realidad no somos rápidos en las curvas en condiciones así. Hay ciertas cosas que nos permiten ser competitivos. Pero se trata de poder hacer diferentes trazadas y conducir de diferentes maneras. Si cambia el viento, si cambian las condiciones, los niveles de combustible, el desgaste de los neumáticos, seguimos teniendo que conducir de una manera específica», se quejó.

«Y no es algo que me guste actualmente, es algo a lo que tengo que adaptarme. Aún tengo mucho a lo que adaptarme como piloto, y no es ni mucho menos el coche que quiero conducir. Somos uno de los coches más lentos en las curvas cuesta abajo, es un área que nos ha ido mal en los últimos años«, subrayó Lando, que también atribuyó una parte a los neumáticos: «Les gusta la línea recta en cualquier punto, no les gusta el paso por curva. Es muy difícil igualarlos».

A la pregunta de qué se podría hacer para solucionar el problema, el piloto de 23 años cree que la aerodinámica puede ser un punto, pero no es el foco principal en el que hay que trabajar para aportar rendimiento al MCL60.

«No creo que se trate sólo de buscar aerodinámica, sino también mecánica y unirlo todo para crear pequeños trucos y cosas que algunos equipos tienen para acelerar el rendimiento a baja velocidad», concluyó.

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