«No debería haber ocurrido»: pilotos reclaman ante F1 y FIA por clima extremo en Qatar

Varios pilotos sufrieron malestares debido al calor extremo durante el GP de Qatar. Y algunos corredores, como Lando Norris, consideraron que la carrera no se debería haber corrido en estas condiciones.

Por si no fuera suficiente con la necesidad de tres paradas en boxes en una carrera de 57 vueltas debido al peligroso desgaste de los neumáticos, el intenso calor del GP de Qatar desencadenó que prácticamente todos los pilotos de la parrilla tuvieran algún tipo de molestia durante y después de la competencia. Y por este motivo, los corredores pidieron soluciones inmediatas para que estas condiciones extremas no se repitan el año que viene.

Uno de los más críticos fue Lando Norris, tercero en la carrera qatarí. El piloto británico de McLaren aseguró haber «encontrado el límite» de lo que los pilotos son capaces de soportar durante un GP: «Lo triste es que lo hayamos descubierto así», manifestó.

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Alex Albon fue uno de los pilotos con dificultades para salir de su auto al final de la carrera. (Vídeo: reproducción/F1 TV)

Los termómetros en Qatar no dieron tregua desde el viernes, con temperaturas siempre por encima de los 30°C, además de fuertes vientos que depositaban mucha arena sobre el asfalto. Pero el domingo, la altísima humedad relativa generó un ambiente de «sauna», con temperaturas que alcanzaban casi los 40°C incluso a las 8 de la noche en Lusail.

La consecuencia de esta combinación puso en peligro a los pilotos. Logan Sargeant, por ejemplo, no alcanzó a ver la bandera a cuadros, abandonando tras sufrir una intensa deshidratación durante la carrera. Su compañero de equipo, Alexander Albon, también necesitó ayuda para salir del auto y fue trasladado al centro médico tras una «exposición aguda al calor».

Lance Stroll, que logró cruzar la línea de meta en Qatar, aseguró que sufrió desmayos cuando aún estaba en el auto: «Estaba mareado, con la tensión baja y me desmayé en el coche», contó el canadiense. Esteban Ocon «vomitó durante dos vueltas», en las vueltas 15 y 16, y pensó: «Mierda, va a ser una carrera larga».

«Intenté calmarme, recordar que la parte mental es la más fuerte en el deporte, conseguí controlarme y terminar la carrera. Pero, sinceramente, no esperaba que fuera tan difícil», declaró el piloto del Alpine #31.

«Nunca es una situación agradable», continuó Norris. «Algunos acaban en el centro médico o desmayados, cosas así. Es algo muy peligroso», advirtió, haciendo hincapié en que no se trata sólo de decir a los pilotos que «entrenen más duro».

«Estamos en un auto cerrado que se calienta muchísimo en una carrera muy exigente físicamente.
Es frustrante, en la televisión no parece tan físico. Pero cuando hay pilotos que abandonan o acaban en mal estado, es demasiado para la velocidad que alcanzamos, es muy peligroso», prosiguió.

Lance Stroll se sintió mal al salir de su auto y pidió asistencia a a una ambulancia en el GP de Qatar. (Video: F1)

El Gran Premio de Qatar del próximo año tendrá lugar a principios de diciembre, y se espera que las temperaturas sean mucho más amenas que en la edición de 2023. De igual manera, Norris le pidió a la F1 que tome medidas para evitar que se repita el caos visto el pasado domingo:

«Sé que la carrera del año que viene será al final de la temporada, con un tiempo mucho más frío, pero es algo en lo que hay que pensar. Estoy seguro de que hablaremos de ello, porque no debería haber ocurrido en primer lugar», añadió el inglés.

Aunque no terminó en el centro médico, Charles Leclerc también sufrió mucho por el fuerte calor y apoyó a sus colegas, diciendo que si el escenario se repite en 2024, tendrá que ser discutido entre los pilotos antes de la carrera.

«Creo que si nos encontramos en la misma situación el año que viene en Qatar, tendremos que discutirlo entre nosotros como pilotos. Siempre nos miramos al final de la carrera cuando estamos sentados, y esta vez se notaba que era diferente. Algunos estaban realmente mal», prosiguió, advirtiendo también que no se trata de una cuestión de mejor preparación física: «Es una deshidratación hasta tal punto que la vista empeora mucho. El ritmo cardíaco se dispara, y es muy difícil controlar todo eso, así que fue muy, muy difícil», concluyó Leclerc.

La Fórmula 1 regresa dentro de quince días, entre el 20 y el 22 de octubre en Austin, con el Gran Premio de Estados Unidos. GRANDE PRÊMIO en Español llevará a cabo una cobertura completa.