Director deportivo de Red Bull abandona el equipo a finales de 2024 y se suma a Audi

Red Bull ha sufrido un nuevo golpe en la estructura de sus campeones de Fórmula 1 en los últimos años: Jonathan Wheatley, director deportivo, dejará el equipo a finales de 2024 para tomar las riendas del proyecto Audi

Aun liderando los Campeonatos del Mundo de Pilotos y Constructores para la temporada 2024, Red Bull sigue sufriendo golpes en la estructura responsable de sus recientes títulos. Sorprendentemente, el equipo anunció el jueves por la mañana la marcha del director deportivo, Jonathan Wheatley, a finales de año. Wheatley deja la escudería energética para asumir la dirección de Audi en la F1.

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La información sobre Wheatley fue publicada por primera vez por el diario holandés De Telegraaf, que tiene un amplio conocimiento de Red Bull entre bastidores. El equipo no ha tardado en hacer oficial que el director del equipo se marcha. Audi aún no se ha pronunciado al respecto.

«Durante más de 18 años, la relación con Jonathan ha sido fructífera», dijo el jefe Christian Horner.

«Su contribución a los seis títulos de Campeón del Mundo de Constructores y a los siete de Pilotos, primero como jefe de equipo y después como director deportivo, será siempre un hito en la historia de nuestro equipo», añadió.

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El »Caso Horner» generó un fuerte impacto en Red Bull (Foto: Getty Images / Red Bull Content Pool)

Se trata de otra gran pérdida para Red Bull en el mercado de la Fórmula 1. Hace unos meses, el ‘mago de la aerodinámica’ Adrian Newey anunció su salida del equipo con efecto inmediato y sólo terminó el proyecto del Hypercar que estaba produciendo en la fábrica. Después de eso, se marchó definitivamente y está negociando con Ferrari y Aston Martin para continuar en la categoría.

Es el reflejo de un equipo sumido en la crisis institucional más grave que han mostrado los resultados desde que el »caso Horner» saliera a la luz a principios de año. En aquel momento, el jefe de Red Bull fue acusado por un empleado, cuyo nombre permanece confidencial, de haber actuado con conducta impropia. A partir de entonces, se produjo un fuego cruzado en el que Horner recibió el apoyo de los accionistas mayoritarios de la empresa, que actúan a título no ejecutivo, originarios de Tailandia. La parte ejecutiva, en Austria, está en el bando contrario, junto al asesor Helmut Marko y la familia Verstappen.

El pasado mes de mayo, el diario inglés The Times publicó que la permanencia de Wheatley estaba en duda precisamente por su interés en convertirse en jefe de equipo en la F1. Sin embargo, el equipo de la marca de bebidas energéticas intentó sortear la situación y negoció su permanencia. Al final, no funcionó.

Por parte de Audi, Wheatley atraviesa un periodo de incertidumbre. Hace una semana, la compañía anunció la llegada de Mattia Binotto para convertirse en el director de operaciones de F1 de la marca y supervisar todo el proceso, mientras que, por otro lado, despidió a Andreas Seidl -que ocupaba el puesto- y al presidente del consejo de administración de la compañía, Oliver Hoffmann, tras un desencuentro interno entre ambos.

Wheatley se sitúa por debajo de Binotto en el organigrama de Audi y se encargará del día a día de la fábrica y del circuito. Aunque la marca alemana no estará definitivamente en la parrilla hasta 2026, se trabaja a pleno rendimiento para la llegada de una era de nuevos coches y motores a la categoría.

La Fórmula 1 se toma ahora su tradicional descanso veraniego en Europa y regresará del 23 al 25 de agosto en Zandvoort para el Gran Premio de Países Bajos.