Sainz dice que «confió hasta el final» en su victoria en el GP de Gran Bretaña

Fueron 150 carreras, pero finalmente llegó la ansiada y deseada victoria de Carlos Sainz en la Fórmula 1, y el guión del GP de Gran Bretaña de este domingo estuvo lleno de tensión y grandes batallas hasta la última curva. El piloto celebró mucho estando aún en el coche y todo fueron sonrisas en el podio envuelto alrededor de la bandera española.

Sainz ha tenido que luchar mucho para terminar la carrera en lo más alto del podio. Partiendo desde la pole position, perdió el liderato ante Max Verstappen en la primera curva, pero el fortísimo accidente de varios coches que le seguían provocó una bandera roja. De acuerdo con el reglamento, había un nuevo procedimiento de salida con los coches en sus posiciones originales, y esta vez el español vendió caro el adelantamiento, dejando sin posibilidad al holandés de Red Bull.

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“No sé qué decir, es increíble”, dijo Sainz al final de la carrera. “La primera victoria después de 150 carreras y con Ferrari en Silverstone. No tengo nada más que pedir. Es un día muy especial, un día que nunca olvidaré. Es un fin de semana muy especial en general», añadió el piloto.

Sainz todavía tuvo una buena pelea contra su compañero de equipo Charles Leclerc, y luego con Lewis Hamilton, de Mercedes. Pero el coche de seguridad al final provocado por Esteban Ocon le dio al español la oportunidad de arriesgar con los compuestos blandos e ir a por todo o nada, y la estrategia fue un tiro perfecto. Con los neumáticos rojos, Sainz dejaba atrás a Leclerc y recuperaba la primera posición.

“Lewis estaba en la pelea hoy, pero logramos sostenerlo”, dijo el piloto, y luego explicó que también tuvo problemas con el equilibrio del coche, especialmente en la primera parte, con los compuestos medios. “Max nos obligó a empujar con fuerza a altas velocidades”.

“Incluso con todo eso, seguí creyendo que todavía podía ganar. Entonces, de repente, el coche de seguridad me dio la oportunidad de volver al juego. Ya os podéis imaginar los nervios controlados tras la victoria”, concluyó Sainz.