Una tormenta provoca inundaciones en Las Vegas y pone en alerta a la F1
Una tormenta provoca inundaciones y pone bajo presión la logística de la F1 en vísperas del Gran Premio de Las Vegas. Las previsiones indican que lloverá hasta el viernes y exigen una operación urgente para despejar el circuito
Desde principios de semana, Las Vegas se enfrenta a un escenario de lluvias intensas, inundaciones y alertas de riadas que afectan a la ciudad justo en vísperas del Gran Premio de Las Vegas. La tormenta, calificada por los meteorólogos locales como inusual para esta época del año, causó inundaciones en las calles cercanas al circuito, aumentando la preocupación sobre el desarrollo de las actividades en la pista.
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Según la prensa local, el volumen de lluvia de los últimos días es comparable al de regiones lluviosas como Seattle, algo casi imposible de ver en pleno desierto de Nevada. La inestabilidad trajo lluvias continuas desde la madrugada, con tormentas y temperaturas hasta 10 °C por debajo del promedio.
La región está en alerta por inundaciones, con estimaciones de entre 12 y 25 mm de lluvia, que podrían llegar a los 50 mm en puntos aislados. En las montañas cercanas, un aviso de tormenta invernal prevé una acumulación de nieve que podría superar los 0,5 metros en las zonas más altas.
La fuerza del agua afectó directamente a la región donde se monta el circuito urbano de F1, como muestran los videos e imágenes que circulan en las redes sociales: calles completamente inundadas, coches parados y operaciones de limpieza dificultadas por el volumen inesperado de lluvia. Al tratarse de una región desértica, el sistema de drenaje de la ciudad no está diseñado para hacer frente a grandes precipitaciones, lo que explica la rapidez con la que las vías quedaron sumergidas.
La periodista Jennifer Gay informó que «las mismas calles donde se reunirán cientos de miles de aficionados en dos días están inundadas por una fría lluvia invernal», y destacó que la ciudad sufre inundaciones repentinas, daños estructurales e incluso goteras en los techos.
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El pronóstico oficial publicado por la Federación Internacional del Automóvil (FIA) confirma que el jueves y el viernes seguirá habiendo un riesgo considerable de lluvia, especialmente por la tarde y a primera hora de la noche. Durante los dos primeros días de actividades, el cielo estará nublado, con temperaturas entre 8 °C y 15 °C y un 40% de probabilidad de lluvia, incluyendo la posibilidad de precipitaciones durante la FP2 del jueves y durante la ventana previa a la clasificación (que se llevará a cabo el viernes por la noche, hora local, madrugada en Argentina).
Sin embargo, la mejora debería llegar el sábado. La entidad prevé un día soleado, clima seco y sin posibilidades de lluvia para la hora de la carrera, con temperaturas que oscilarán entre los 9 °C y los 17 °C y viento leve del norte. En otras palabras: el principal desafío no debería ser la carrera en sí, sino la preparación del circuito hasta entonces, ya que la limpieza de las vías, el drenaje del agua acumulada y la verificación de daños estructurales deben completarse antes de la apertura oficial de la pista.
La F1 sigue de cerca la situación, ya que cualquier retraso en la normalización de las calles puede comprometer el cronograma de actividades. Al tratarse de un circuito urbano, la pista depende totalmente de las condiciones de la infraestructura de la ciudad, y las operaciones solo pueden comenzar cuando ya no haya riesgo de escombros, charcos profundos o bloqueos logísticos.
La Fórmula 1 vuelve a la acción entre el 20 y 22 de noviembre con el GP de Las Vegas, vigesimosegunda fecha de la temporada 2025. GRANDE PREMIO en ESPAÑOL realizará una cobertura completa del evento.