Según Williams, la pérdida de rendimiento en Spa fue por el desgaste de neumáticos

El jefe de Williams, James Vowles, dijo que el gran desgaste de los neumáticos traseros en Bélgica fue causado por el aire caliente de los frenos.

Sólo un equipo tuvo que hacer tres paradas en boxes durante el Gran Premio de Bélgica de la semana pasada: Williams. El mayor desgaste de neumáticos de toda la parrilla impidió finalmente al equipo británico volver a puntuar, incluso después de un buen inicio de carrera. La razón fue un misterio durante la carrera, pero se investigó poco después: una rotura en la protección que impide que el aire caliente de los frenos afecte a los neumáticos traseros. Al menos esa fue la explicación oficial.

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El jefe de Williams, James Vowles, dijo en un vídeo que ambos pilotos estaban implicados. Alexander Albon fue la sensación de las primeras vueltas de la carrera y llegó a rodar séptimo, pero sólo acabó 14º. Logan Sargeant tampoco pudo puntuar.

La protección en cuestión es un revestimiento alrededor de las ruedas cuyo objetivo es desviar el aire caliente de los tambores de freno lejos de los neumáticos y fuera del coche. Con el aparato dañado, el aire de los tambores de freno hirviendo fue directo a la goma.

«Llegamos con grandes expectativas y pensábamos que teníamos un paquete que se adaptaría a la pista. Por momentos estábamos dando caza a nuestros competidores en luchas bastante entretenidas. Duró hasta la vuelta 16 más o menos, y entonces las cosas cambiaron. Empezamos a retroceder, claramente, en comparación con los demás», dijo.

«Nos adelantó [Esteban] Ocon, pero apareció la lluvia y la cosa volvió a cambiar. Volvíamos a ser rápidos. Pero cuando salió el sol, la temperatura de la pista subió a 31°C, empezamos a sufrir un gran desgaste. En ese momento no nos dimos cuenta de que era eso, pero ahora ya lo sabemos. Nos llevó a hacer tres paradas y a perder mucho en comparación con nuestros rivales. Al final, nos fuimos decepcionados», dijo.

James Vowles, jefe de Williams (Foto: Williams)

«Lo que causó nuestro desgaste no fue nada que pudiéramos haber visto en las actividades previas. Fue un problema que sólo apareció en la carrera. Al final de la carrera, cuando quitamos las ruedas, hay unas protecciones de carbono que cada equipo llama de una manera -latas de tarta o tapones labiales-, pero que están pensadas para controlar el flujo de aire del disco de freno muy caliente con respecto a los neumáticos. La intención es eliminar el aire caliente del coche», explicó.

«Pero nuestra protección se rompió. Probablemente durante una parada en boxes, pero es muy difícil precisar exactamente en qué momento ocurrió», reveló.

«Estoy convencido de que esa es parte de la explicación de por qué sufrimos tanto desgaste y de por qué el inicio de la carrera fue tan diferente al final, así como de por qué nos vimos obligados a hacer tres adelantamientos. Esos cambios son enormes, no sólo aerodinámicamente, aunque hemos trabajado mucho para asegurarnos de que el aire tiene que ir al sitio correcto, sino también en términos de control de la temperatura de los neumáticos traseros», comentó.

«Ha ido bien en el primer stint, más o menos bien en el segundo, y luego hemos tenido problemas. Llegó la lluvia, lo enfrió todo y, de repente, el coche volvió a ir bien. Está muy claro, cuando repasas lo que ha pasado, que nos hemos visto perjudicados por el problema, ambos coches, y ha contribuido significativamente a que hayamos bajado en el orden de fuerza», dijo.

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