Cómo Sam Schmidt superó tetraplejía de 21 años para bailar en el casamiento de su hija

Sam Schmidt quedó tetrapléjico en 2000 a los 36 años, cuando sufrió un accidente mientras participaba de un test de pretemporada de la IRL en el óvalo de Walt Disney World. El impacto destruyó dos vértebras del entonces piloto, que dejó de respirar durante cuatro minutos.

Resucitado y rescatado por el personal médico, Schmidt pasó días de angustia y desesperación en el hospital. La lesión era similar a la del actor Christopher Reeve, conocido por el papel de Superman en el cine, y que nueve años después de la tetraplejia, murió tras una infección. Sim embargo, a diferencia del artista, él logró sobrevivir.

Apenas 14 meses después del accidente, decidió volver al automovilismo, pero como propietario de un equipo. Creó Sam Schmidt Motorsports, que rápidamente se convirtió en una potencia en la Indy Lights, donde coronó a campeones como Thiago Medeiros, Jay Howard, Alex Lloyd, Josef Newgarden y Sage Karam. En Indy, estuvo presente en las 500 millas de Indianápolis, a pesar de las dificultades para ampliar el programa. Alcanzó la cúspide en 2011, con la pole position de Alex Tagliani en el Brickyard.

Sam Schmidt sufrió un accidente en 2000 y quedó tetrapléjico desde entonces. (Foto: L. M. Otero/AP)

El equipo siguió creciendo, especialmente con la llegada de Ric Peterson y Davey Hamilton como accionistas. Simon Pagenaud consiguió las primeras victorias, a las que siguió las de James Hinchcliffe. En 2019, se anunció una asociación con McLaren a partir de 2020. En la actualidad, Pato O’Ward intenta llevar al equipo al título. Con el éxito en el automovilismo cumplido, Sam se abocó a cumplir otro sueño: bailar en la boda de su hija Savannah.

El inicio de esta trayectoria se sitúa en 2013, cuando Sam logró el anhelo de volver a conducir. En un proyecto con Arrow Eletronics, un equipo de ingenieros modificó un Corvette que permitía a Sam conducir utilizando el movimiento de la cabeza. Fue con este coche con el que el ex piloto participó en la Indy 500 durante el Carb Day, en 2014, alcanzando la marca de 170 km/h.

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«Sólo bromeaba, le dije: ‘si tienes éxito con este Corvette, cuando mi hija esté lista para casarse, tienes que crear algo para que la lleve al altar y forme parte de la boda», dijo Schmidt al periódico estadounidense IndyStar.

Savannah, que solo tenía dos años cuando su padre se lesionó en enero de 2000, para 2019 estaba cerca de formalizar su relación con su novio Adam. Viendo que el matrimonio estaba en camino, Sam decidió acercarse de nuevo a Arrow para cumplir su sueño.

«Tenía la sensación de que las cosas iban en esa dirección y que estaba cerca de proponérselo. Así que les dije: ‘No sé cuánto tiempo, pero no es mucho’. Tenemos que trabajar», afirmó Sam.

Centrado en el proyecto, Arrow asignó a cuatro ingenieros la creación de un exoesqueleto que hiciera caminar a Sam. Utilizaron un marco de base probado para la adaptación. Añadieron características de teconología y estudiaron el tipo de lesión sufrida por Schmidt para adaptarla al funcionamiento del dispositivo.

El expiloto y dueño de equipo de IndyCar cumplió el sueño de bailar en el casamiento de su hija. (Foto: IndyStar)

El exoesqueleto se instala de cintura para abajo, con motores en las rodillas y las caderas para simular la marcha. Pero para utilizarlo, Schmidt necesitaba ir al gimnasio. La densidad ósea y la atrofia son recurrentes para aquellas personas que presentan una discapacidad motriz durante más de 20 años. Después del accidente que derivó en su discapacidad, el expiloto no había utilizado ninguno de estos músculos, y tenía que asegurarse de que eran lo suficientemente fuertes.

Sam pasaba de cuatro a cinco días a la semana haciendo ejercicio y perdiendo peso para el gran día: el 25 de abril de 2021. Schmidt esperaba llevar a Savannah al altar, pero el terreno boscoso era difícil incluso para transportar su silla de ruedas. Después de la boda, Savannah estuvo en la recepción. El exoesqueleto requiere que una persona equilibre a Sam desde atrás.

«Y entramos juntos, y fue la primera vez que me vio de pie y caminando. Así que decir que no había un ojo seco en esa sala es casi un eufemismo», recordó Sam, que además de bailar con su hija, también bailó la canción ‘Stand By Me’ con su mujer.

«Cuando mi madre fue a bailar con él, fue cuando la emoción se apoderó de él. Habían pasado 21 años sin que mi madre tuviera la experiencia de bailar con él de pie. En ese momento, aunque sólo sea para un baile, lo recuperó. Fue el momento más especial que he presenciado», recordó Savannah a IndyStar.

«Fue una locura, un caos, mejor de lo que nadie esperaba. Fue eufórico. Olvidé cómo era la vista desde aquí arriba, porque llevo 21 años sentado mirando la cintura de la gente. He estado de pie y mirando la parte superior de sus cabezas», comentó Sam.

El exoesqueleto de Schmidt es sólo la versión 1.0. Según el ex piloto, el objetivo es que se levante y camine. El prototipo requiere que el cuerpo transfiera el peso a la derecha y a la izquierda para mover las piernas. Schmidt no puede realizar la función. Arrow está trabajando en la versión 2.0, que utilizará el comando de voz para que Sam inicie los pasos y no necesite ayuda. «El gran obstáculo de la tercera etapa es el manos libres. Hacerlo yo mismo», añadió.