Palou resiste a Herta y gana GP de Laguna Seca de la IndyCar: O’Ward 8, Canapino 18
Álex Palou se impuso en Laguna Seca, en una carrera con despistes varios en dónde la estrategia tomó relevancia sobre el final.
Laguna Seca siempre es un escenario que trae emoción a la IndyCar en pista. Ésta no fue la excepción, con lo que fue una gran despedida para los impulsores tal y como se utilizaron hasta hoy, ya que a partir de la próxima fecha comienza la era híbrida en la divisional estadounidense. Una vez más, Álex Palou se impuso de forma sólida y estratégica en carrera a lo largo de las 95 vueltas de competencia y ganó la carrera para continuar su escalada en el campeonato de pilotos.
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Segundo terminó Colton Herta, uno de los favoritos a quedarse con la victoria. El de Andretti era el único que podía darle batalla al español, aunque las reiteradas banderas amarillas del final coartaron sus chances de ataque. Alexander Rossi terminó tercero, en una actuación en la que también se lució la solidez de McLaren.
Desde la largada, Laguna Seca prometía ser una carrera con despistes, neutralizaciones y estrategia. Aunque hubo sólo dos grandes neutralizaciones, la punta cambió de manos varias veces. Siendo Palou, Herta e incluso Rossi y Josef Newgarden líderes brevemente.
En el inicio, Palou no pudo defender la posición de vanguardia y bastó sólo la primera curva para que Kyle Kirkwood tomara la punta antes de la primera detención. El trazado de Laguna Seca se caracteriza por sus límites de pista y las altas chances de levantar polvareda en los despistes, ocasionando daños de visibilidad fácilmente. En la primera parte, Marcus Ericsson y Herta salieron brevemente aunque sin mayores riesgos.
A partir de la segunda detención, Palou avanzó una vez más estratégicamente para recuperar la punta mientras del segundo para atrás, las posiciones cambiaban frenéticamente. El avance de los Penske se hacía más evidente, y Newgarden también aprovechó las detenciones para ganar lugares hasta llegar a disputar el top 5.
A partir de la tercera parada, la carrera tomó otro color al momento que Romain Grosjean se puso entre segundo y cuarto, para terminar en las puertas del podio en un circuito en donde los autos del Juncos Hollinger Racing históricamente se han lucido siempre. La primera bandera amarilla llegó en la segunda mitad con Luca Ghiotto sin chances de volver a la pista por sus propios medios.
En las últimas 20 vueltas, Christian Lundgaard y Marcus Armstrong protagonizaron un roce en pista en el que el danés sacó de pista al joven de Ganassi. Si bien Armstrong no golpeó su auto ni a otro competidor, la dirección de carrera no sacó la bandera amarilla por un largo tiempo, mientras Newgarden, que venía primero, pasaba por los pits. La neutralización benefició a Palou ya que sucedió cuando el ganador de las Indy 500 ya había ingresado.
En el relanzamiento, los Penske de Will Power y Scott McLauglin se tocaron aunque sin causar mayores daños. La racha de Lundgaard no cambiaba y en el momento de atravesar la zona del sacacorchos se despistó. El auto #3 fue el más dañado por el contacto por lo que comenzó a perder el rumbo fácilmente a 13 giros del final mientras que el motor de Jack Harvey ocasionó otra bandera amarilla que podía beneficiar al líder y coartar los avances de Herta.
A 10 vueltas del final, Kyffin Simpson hace un trompo y hace contacto con el auto de Graham Rahal, terminando ambos a cada lado de la tierra. La bandera amarilla salió nuevamente a la pista mientras la bronca del de RLL se hacía notar a simple vista.
Agustín Canapino tuvo una buena largada, ya que por muy poco el día sábado quedó en las puertas del Fast 12. El «Titán de Arrecifes» partió desde el 13° lugar y aunque al principio le costó mantenerse en la batalla, eligió estirar un poco más su segundo stint para intentar avanzar posiciones en el momento que Ghiotto ocasionaba la bandera amarilla. Después de su segunda detención, Canapino empezó a perder terreno y para el último tercio de carrera se encontraba 21°. Finalizó 18º, y llegó a ponerse 12º para el último relanzamiento pero perdió terreno por cumplir una penalización.
En el final cuando ondeaba la bandera blanca, Newgarden perdió el control de su auto y bajó del quinto al 19º lugar.
Patricio O’Ward comenzó disputando las primeras posiciones. La solidez de los McLaren en el trazado se hacía evidente también con el podio de Rossi. El mexicano después de su segunda detención comenzó a perder terreno y pero con algo de dificultad brevemente se logró colocar cuarto antes de su última detención en los pits para terminar 8.
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La próxima cita de la IndyCar será dentro de dos semanas, cuando el GP de Mid-Ohio le dé la bienvenida a la nueva era de impulsores híbridos del 5 al 7 de julio. GRANDE PRÊMIO cubre toda la información de la categoría estadounidense todo el año.