Márquez celebra triunfo en una de las fases «más importantes y duras» de su carrera
Marc Márquez lloró en su primera victoria en el MotoGP desde el GP de la Comunidad Valenciana 2019. Según el piloto de Honda, el triunfo que obtuvo este domingo en el GP de Alemania, marcó un hito en su carrera deportiva en el Campeonato del Mundo de MotoGP.
Marc pasó nueve meses alejado de las pistas tras fracturarse el brazo derecho en una caída en el GP de España del año pasado. A lo largo de este periodo, marcado por un intento desastroso de regreso temprano, el español de Cervera tuvo que someterse a tres cirugías y, desde su regreso al Campeonato del Mundo en Portugal, no había sido el mismo piloto de antes.
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Sin embargo, Sachsenring siempre fue un circuito perfecto para Marc, ya que tiene 10 curvas a la izquierda, sus favoritas, y sólo tres a la derecha, el lado de su cuerpo que todavía no está perfectamente adaptado.
Con una buena largadaa, Marc Márquez consolidó su liderazgo tras un duelo con Aleix Espargaró y, aunque estuvo presionado por Miguel Oliveira en la mitad final de la carrera, se mantuvo firme para conseguir su undécima victoria consecutiva en el circuito de Chemnitz, la octava en MotoGP.
«Este es uno de los momentos más importantes y duros de mi carrera», dijo Marc todavía en el parque cerrado. «Hoy sabía que era una gran oportunidad. No fue fácil controlar la mentalidad, porque vengo de una situación difícil, tres ceros seguidos, pero pensé: hoy es el día», continuó.
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«Antes de este fin de semana, pensé en intentar luchar por el podio, en intentar estar cerca de los de arriba, pero la victoria era una pequeña posibilidad», admitió. «Entonces pensé: ‘Si estoy en perfectas condiciones, lo intentaré'», explicó.
El momento decisivo en la carrera de Márquez fue precisamente la llegada de las primeras gotas de lluvia que no llegaron a caer de forma efectiva, pero que le permitieron romper el pelotón y aislarse en la punta.
«Cuando vi algunas gotas de lluvia en la cuarta o quinta vuelta, me dije: ‘Es mi carrera’. En ese momento, empujé y mantuve el mismo ritmo de carrera que antes. Cuando vi las gotas por segunda vez, me esforcé aún más y pensé que era el momento de arriesgarme», detalló. «Di unas cuantas vueltas y cuando pasó ese momento, empezó una segunda carrera, que fue con Miguel. Estuvo al acecho», subrayó.
La dificultad, sin embargo, no vino sólo de la presión de la KTM portuguesa, sino de los recuerdos que inundaron al seis veces campeón.
«Fue muy difícil mantener la concentración, porque todos los recuerdos, toda la situación del año pasado estaban en mi cabeza. Pero lo hicimos. Y lo volveremos a hacer», advirtió. «Estamos en una situación difícil, pero intentaremos mantener el mismo nivel», cerró.
El MotoGP vuelve a la acción el próximo fin de semana con la novena prueba del calendario, el GP de Holanda en Assen.