Mir admite que se planteó retirarse de MotoGP, pero: «Me habría arrepentido»
A sus 25 años, Joan Mir afirma que se planteó colgar el casco por los problemas que tiene en MotoGP, pero reconoce que se habría arrepentido de la decisión y que el nacimiento de su primer hijo le ha traído alivio.
Joan Mir dijo que se pensó el retiro de la competición, ante todos los problemas que tiene con la Honda, no solo por el manejo de la RC213V, sino por las lesiones que tuvo por las caídas. A pesar de esto, el campeón 2020 de MotoGP comentó que se hubiera arrepentido si tomaba esa decisión.
La espantada de Suzuki de las dos ruedas, dejó sin sillín al oriundo de Mallorca, y fue repescado por Honda, pero sigue sin demostrar el talento que lo llevó tan joven al Mundial de Motociclismo.
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Hasta el momento, Mir solo tiene cinco puntos en MotoGP, además de muchas caídas, lo que no le permite tomar confianza en una moto que es muy difícil de pilotar, incluso reconocido por Marc Márquez.
Ante la pregunta de DAZN sobre si se había planteado el retiro, Mir respondió: «Sí, en cierto modo lo he hecho».
«Lo cierto es que estoy convencido de que en el futuro me habría arrepentido», comentó el compañero de Márquez. «El día que decida que, en el futuro, tengo que asegurarme de que no me arrepentiré. De momento, me doy cuenta de que no es el momento porque me arrepentiría, así que hay que seguir apretando los dientes», aseguró.
«Al final, un deportista de élite se alimenta de buenos resultados, de buenos momentos, de todo eso. Más aún cuando has tenido buenos resultados en el pasado. No me considero un corredor que venga aquí de paseo y disfrute de todo. Me gusta ganar, los buenos resultados», se expresó Joan, que ha dejado de tener buenos resultados, esos de los que disfrutaba como compañero de Álex Rins en Suzuki.
Mir desveló que se siente frustrado por las lesiones y los pobres resultados, y que el parón de verano en Europa le ha servido para recargar energías: «Me gusta estar relajado en casa. Con toda la presión que supone MotoGP, es aún más difícil seguir adelante cuando no tienes una recompensa. Y es bastante difícil para mí. Hace mucho tiempo que no me alimento de esos buenos resultados, sólo de la parte mala de todo esto, que son las caídas, el sufrimiento encima de la moto, los viajes… Todas esas partes malas son a las que me enfrento desde el año pasado con Suzuki, cuando decidieron cerrar. De alguna manera, los resultados no llegan y creo que este parón ha sido súper bueno para mí».
Más allá de lo que ocurre en pista, el #36 dijo que la llegada de su primer hijo le ha dado alegrías y tranquilidad: «Tuve la suerte de ser también padre y creo que, en un momento tan difícil, fue fantástico tener esa alegría. Eso es lo que experimenté en esas vacaciones, fue fabuloso para mí. Me dio fuerzas para seguir adelante».
Por último, Mir reconoció que la vida de un piloto de MotoGP está rodeada de privilegios, pero también de mucha presión: «Tenemos la suerte de hacer lo que nos gusta, nos ganamos muy bien la vida, pero la verdad es que estamos sometidos a mucha presión desde pequeños. Desde los diez años estoy sometido a esa presión de ‘espabila o no vamos más'», explica.
«Este año, antes de las vacaciones, creo que mi cabeza me decía: ‘Calma, vamos a priorizar las cosas’. He estado trabajando con psicólogos deportivos, he estado haciendo todo lo que creo que es necesario, porque quiero continuar», concluyó.
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