F1 evita cancelar GP, pero no correrá en Rusia “en las circunstancias actuales”
Como consecuencia del conflicto armado desatado en Ucrania, la Fórmula 1 afirmó que no habrá GP de Rusia en las circunstancias actuales.
La invasión rusa en territorio ucraniano este jueves tuvo efectos colaterales en el mundo del deporte y la Fórmula 1 también terminó involucrada. Tras una reunión entre los jefes de equipo y los responsables de la categoría, se decidió no correr el GP de Rusia de este año, previsto inicialmente para el 25 de septiembre en Sochi.
En un comunicado enviado el viernes por la mañana, durante los ensayos de pretemporada en Barcelona, la F1 dijo que es imposible seguir adelante con la fecha de Rusia en las circunstancias actuales. No se informó si existe la posibilidad de que una nueva competencia ocupe su lugar, o si se hará una posterior reevaluación de la situación en Rusia para poder llevarla a cabo.
Los equipos de la categoría se reunieron este jueves por la noche en Barcelona para discutir los efectos de la invasión rusa de Ucrania. En un comunicado emitido antes del inicio de la segunda jornada de pruebas en Barcelona, la categoría aseguró que estaba supervisando el desarrollo de la situación y optó por no comentar la celebración de la carrera.
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Stefano Domenicali, director ejecutivo de Liberty Media, se había referido sobre el tema: «La Fórmula 1 intenta controlar la situación. Tenemos una reunión entre nosotros para entender lo que ocurre y cómo afrontarlo. La F1, en este sentido, no es lo más importante. Lo que ocurre allí es muy triste», lamentó.
«Por el momento sólo podemos intentar tener, entre nosotros, la discusión y entender las implicaciones, y cuál es la mejor opción para el futuro», finalizó.
Los efectos de la invasión rusa, que comenzó en las primeras horas del jueves, ya había tenido sus primeras consecuencias dentro del paddock. Haas, que utilizaba los colores de la bandera rusa desde el año pasado, retiró su decoración la invasión de Ucrania. También los logotipos del mayor patrocinador del equipo, la petroquímica rusa Uralkali, también fueron removidos.
¿Cómo se desencadenó el conflicto entre Rusia y Ucrania?
El lunes, el presidente ruso Vladimir Putin reconoció, mediante un decreto, la independencia de las provincias separatistas de Donetsk y Luhansk. La medida generó sanciones de la Unión Europea y Estados Unidos al gobierno y a las empresas del país. Esto además aumentó el temor a un enfrentamiento en la región.
El jueves, Rusia atacó a Ucrania en un movimiento calificado por Kiev como una «invasión total». A las 5:45 de la madrugada de Moscú, Vladimir Putin, presidente de Rusia, anunció en un comunicado una «operación militar especial» para «proteger a la población del Donbass», una zona de mayoría étnica rusa en el este de Ucrania.
El mando militar ruso afirmó que «las armas de precisión están degradando la infraestructura militar, las bases aéreas y la aviación de las Fuerzas Armadas de Ucrania». Según la cadena británica BBC, hay informes de tropas que cruzan varios puntos de la frontera y explosiones cerca de las principales ciudades del país, no sólo en Donbass, donde los grupos separatistas han sido reconocidos por Rusia.
En la televisión, Putin dijo que Rusia no planea una ocupación de Ucrania. Sin embargo, amenazó con una respuesta «inmediata» a cualquiera que intente perturbar la operación actual. El gobernante ruso recomendó a los soldados ucranianos que se rindieran y volvieran a casa. «De lo contrario, se culparía a la propia Ucrania del derramamiento de sangre», consideró Putin.
El presidente ucraniano Volodymyr Zelensky decretó la ley marcial en todo el país, instituyendo un régimen de guerra y convocando a gran parte de los reservistas de las fuerzas armadas. Inclusive, impidió que cualquier hombre que tenga entre 18 y 60 años salgan del país en los próximos 30 días. En las últimas horas, los relatos son de que las fuerzas rusas lograron invadir la capital Kiev desde el norte.
Según las autoridades ucranianas, el primer día de conflicto terminó con más de 300 muertos. Se trata de la crisis militar más grave de Europa en la que está implicada una potencia nuclear y una de las mayores desde la Segunda Guerra Mundial.