Russell detalla ayuda a comisarios tras choque de Zhou en Silverstone: «Reacción humana»
George Russell, director de la GPDA, dijo que la acción en el GP de Gran Bretaña fue el resultado de un instinto natural y que en ese momento no pensaba "como un piloto de carreras".
Guanyu Zhou vivió momentos legítimos de terror en la salida del GP de Gran Bretaña de este año: al comienzo de la carrera de F1 2022 en Silverstone, tras un toque en medio del pelotón en una lucha con George Russell y Pierre Gasly, el piloto de Alfa Romeo volcó, se deslizó boca abajo, rebotó tras pasar por la grava y se detuvo entre la barrera de neumáticos y la valla, al revés. Impresionante escena.
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Inmediatamente después del accidente y en cuanto se dio cuenta de que su Mercedes no podría volver a la pista en ese momento, Russell lo dejó todo, saltó del coche y fue a ver cómo estaba Zhou. El británico ayudó a los funcionarios a comprobar el estado del chino y colaboró en las operaciones de rescate.
«Cuando ves un accidente así… Al fin y al cabo, sólo hay 20 pilotos de Fórmula 1 en el mundo. Sabes exactamente lo que se siente dentro de esa cabina. Llevar tres capas de mono, casco, guantes, pasamontañas, plugin de comunicación por radio, sistema de hidratación en la boca… Es un poco claustrofóbico», empezó diciendo a Autosport el director de la GPDA (Asociación de Pilotos de F1).
«Así que ves un coche volando por el aire y aterrizando en una posición, básicamente, de atrapamiento. Es una situación horrible. Yo ya estaba fuera de carrera y, cuando eso ocurrió, lo primero que pensé fue: ‘¿puedo ayudarte de alguna manera?», continuó el británico.
La bandera roja resultante del accidente duró aproximadamente una hora. Zhou fue trasladado al centro médico de Silverstone, donde no se le apreciaron lesiones graves y fue dado de alta poco después. Tras el susto, el piloto de Alfa Romeo admitió que se había salvado gracias al dispositivo de protección de la cabina, el halo.
«Creo que si yo estuviera en esa posición, querría toda la ayuda posible lo antes posible, porque no sabes lo que va a pasar en la secuencia, si el coche se va a incendiar o algo así. Fue más una reacción humana que la de un piloto de carreras», concluyó Russell.