Las incógnitas de Red Bull en una definición que toma color de Mercedes

La previa del GP de Sao Paulo daba nuevamente como favorito a Max Verstappen. Dos victorias seguidas en Estados Unidos y en México, 19 puntos a favor en el campeonato y un mejor rendimiento del motor Honda con respecto del Mercedes en la altura de la capital paulista, formaban un conglomerado difícil de batir en la pista de Interlagos. Sin embargo, primero sobrevino la sorpresa. Y luego, se alzó un dominio excepcional de Lewis Hamilton que dejó en un mar de incertidumbre a Red Bull.

El primer golpe de escena de Mercedes fue con el cambio del motor de combustión interna en el motor de Hamilton, que resultaría también en una penalización de 5 posiciones en la grilla del domingo. Y cuando parecía que esto significaría en un escollo más para el equipo siete veces campeón, el W12 empezó a evidenciar desde el viernes un ritmo demoledor, liderando plenamente la actividad del viernes en Sao Paulo; primero con un entrenamiento y luego con la clasificación.

Luego, sobrevino aquella denuncia de Red Bull sobre el alerón trasero del monoplaza del británico ,y su posterior exclusión ya en pleno sábado, por lo que parecía que el fin de semana para Mercedes estaba perdido. Sin embargo, reconfigurar su alerón trasero le costaría menos de lo esperando a la escudería de Brackley, para espanto de Red Bull. Hamilton logró superar a todos los autos entre la carrera sprint y la principal, sacando en promedio 20 kilómetros de diferencia a Verstappen en las rectas de Interlagos.

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¿Y ahora, Red Bull?

En principio, hay por resolver por el momento una cuestión deportiva. Este martes, la Fórmula 1 reveló las imágenes de la cámara onboard de Verstappen en Interlagos. Y en referencia a su duelo con Hamilton, fue notoria una encerrada del holandés, que llevó a ambos pilotos a la zona de escape. Por este motivo, Mercedes pidió una revisión ante la FIA de la no sanción al piloto de Red Bull. Y en el peor escenario para la escudería austríaca, Verstappen podría recibir una sanción para la grilla del GP de Qatar. La única cuestión en la que el equipo de bebidas energéticas está atado de manos.

Ya en lo estrictamente técnico, en encarreras pasadas fue notoria una mejora de Mercedes en los sectores rápidos. Los ingenieros habían adoptado una suspensión que bajaba para obtener una mejor velocidad, pero no había logrado la diferencia que se plasmó en Interlagos. La evolución del W12 puede implicar solamente el motor, o quizás cuenta con un nuevo truco aerodinámico secreto por parte de Mercedes. Esto es algo que Red Bull deberá averiguar, y en paralelo, contrarrestar para volver a equilibrar las fuerzas con el equipo alemán.

Por otro lado, también será una cuestión a analizar qué alcance tendrá este salto en el rendimiento de Hamilton. El recambio de piezas le sienta bien a británico, le da un motor más potente, pero con el paso de las carreras tiene una mayor caída en su potencia. En ese sentido, el motor Honda suele ser más equilibrado y pierde poca potencia en su vida útil. Y Verstappen aún es competitivo con un motor que no cambia desde el GP de Rusia.

Si por el contrario, Mercedes repite su dominio en Qatar, Red Bull estará ante un escenario mucho más complejo. El circuito de Losail y el de Arabia Saudita debutarán en la Fórmula 1, por lo que no hay prácticamente referencias sobre la pista. Red Bull deberá acertar con la puesta a punto desde el principio del fin de semana, y aún así ser más contudente que Mercedes. Pese a estar 14 puntos delante en el campeonato de pilotos, Verstappen poco podrá hacer frente a un dominio como el que exhibió Hamilton en Interlagos en igualdad de condiciones.

El campeonato está abierto. Pero en esta mano, las mejores cartas las tiene Mercedes.