Leclerc celebra ritmo de Ferrari y cura alma con victoria en Austria: «Necesitaba esto»

Charles Leclerc se lavó el alma en casa de su rival Red Bull. El piloto monegasco de Ferrari ganó el GP de Austria este domingo con derecho a tres adelantamientos sobre Max Verstappen, que luchó mucho con los neumáticos y el equilibrio del coche y tuvo que conformarse con el segundo puesto.

Celebrando mucho con el equipo de Maranello, Leclerc elogió el buen ritmo del F1-75 en el trazado de Spielberg, recordando que las últimas carreras habían sido bastante complicadas. La victoria, por tanto, venía a confirmar el verdadero potencial de Ferrari en la temporada 2022 de Fórmula 1.

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“Realmente necesitaba esto”, dijo Leclerc aliviado al final de la carrera. “Las últimas cinco carreras han sido increíblemente difíciles para mí y para el equipo. Finalmente demostramos que el coche tiene ritmo, y poder hacerlo es increíble. Tenemos que presionar hasta el final”, subrayó.

Fue una carrera muy ocupada en estrategias de paradas en boxes, pero esta vez, Ferrari se arriesgó y no tuvo miedo de llamar a su piloto a boxes cuando el coche de seguridad virtual entró en acción al final, curiosamente, provocado por el abandono del otro F1-75, el de Carlos Sainz.

“Fue una muy buena carrera. Al principio tuvimos buenas peleas contra Max, pero el final fue bastante difícil. Tuve problemas con el acelerador. Se atascaba entre un 20% y un 30% a bajas velocidades, por lo que era muy complicado, pero logramos llegar hasta el final y estoy muy feliz”, continuó el #16.

Por último, el monegasco explicó que el problema apareció casi al mismo tiempo que el abandono del compañero, pero sabía que no lo provocaba el bloque de potencia. “Sabía que no era un problema con el motor porque era el pedal el que estaba raro. Afortunadamente, llegamos hasta el final”.