¿Cómo están hechos los cascos que llevan los pilotos de Fórmula 1?

Desde principios de la década de 2000, los cascos de Fórmula 1 se fabrican con fibra de carbono. Aunque es un material más pesado que la fibra de vidrio -que se utilizó hasta la década de 1990-, la fibra de carbono permite una distribución más uniforme del impacto en caso de choque.

Además de la «carcasa» del casco, la parte interna del aparato está rellena de una espuma de alta densidad, responsable de absorber los impactos y también de distribuir la carga de forma uniforme, evitando que el elemento se rompa. Además, hay un ajuste para el mentón del piloto, lo que permite una mayor comodidad y aumenta la seguridad.

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Para que el equipo pueda fabricar el casco, se realiza un escaneado láser de la cabeza del piloto que determina todas las medidas necesarias. La Fórmula 1 cuenta actualmente con cuatro proveedores de cascos: Bell, Schuberth, Arai y Stilo. El primero de ellos es sin duda el más popular, pero algunos pilotos también optan por las otras marcas.

Una curiosidad sobre los cascos: hasta 2022, solo los de la marca Bell disponían de la tecnología ‘Driver’s Eye’, que ofrece una visión con una cámara situada a la altura de los ojos de los pilotos. Sin embargo, la Fórmula 1 ha llegado a un acuerdo con la empresa RacingForce y pondrá la cámara a disposición de otros fabricantes en 2023.