Vettel se dice “impactado” con invasión a Ucrania y descarta correr GP de Rusia
Sebastian Vettel fue terminante en su decisión de no correr el GP de Rusia y criticó a Vladimir Putin por invadir el territorio ucraniano.
Los pilotos de la Fórmula 1 expresaron este jueves su deseo de no disputar el GP de Rusia previsto para septiembre. El motivo es la invasión de Ucrania por parte de Rusia durante esta madrugada, en una de las peores crisis militares desde el fin de la Segunda Guerra Mundial en 1945. Las declaraciones se hicieron en una rueda de prensa oficial de la FIA, celebrada tras la primera parte de la segunda jornada de entrenamientos de pretemporada de F1 en Barcelona. El más contundente fue Sebastian Vettel, que lo dejó claro: aunque se celebre la prueba en Sochi, él no correrá.
El tetracampeón del mundo se mostró «sorprendido» por la invasión rusa y dejó clara su posición respecto a la competencia prevista para el 25 de septiembre.
«Es horrible ver lo que está ocurriendo. Si miras el calendario, tenemos una carrera programada en Rusia. Hablo por mí: no debo ir y no iré. Es un error correr en ese lugar. La gente es asesinada por razones estúpidas. Hay allí un liderazgo muy extraño y rabioso», reveló Vettel, refiriéndose a Vladimir Putin, el presidente de Rusia.
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«Es algo de lo que todavía hablaremos, pero la GPDA [Asociación de Pilotos] no se ha reunido todavía. Personalmente, me sorprende y entristece lo que está ocurriendo. Veremos lo que ocurre de aquí en adelante. Ya he tomado mi decisión», continuó.
En la misma rueda de prensa, Max Verstappen -el actual campeón del mundo- coincidió con la opinión de Vettel. Es la primera vez desde su llegada a la F1 que el holandés adopta una postura más firme en cuestiones políticas.
«Si un país está en guerra, no sería correcto correr allí», resumió el holandés. «Pero no es sólo lo que yo pienso. Todo el paddock tiene que decidir qué hacemos ahora», aseguró.
Otros pilotos presentes en la entrevista hablaron del tema, pero no con la contundencia de Vettel y Verstappen. Charles Leclerc se mostró «triste de ver algo así en 2022», pero evitó opinar sobre el conflicto en Europa del Este.
«No tengo toda la información de lo que está pasando. Tomaremos una decisión, creo que la Fórmula 1 probablemente tendrá una definición pronto. No puedo expresarme más allá, sinceramente no tengo toda la información al respecto», dijo.
Fernando Alonso siguió la misma línea de declaraciones que el monegasco de Ferrari, pero destacó el poder de decisión de los pilotos, independientemente de la postura que adopte la dirección de la Fórmula 1.
«Será una decisión tomada por la Fórmula 1 [si se corre o no]. Creo que todos tenemos opiniones y son las mismas que las de los demás, pero no tenemos poder de decisión. Podemos tomar nuestras propias decisiones individuales, por supuesto, pero creo que la F1 hará lo mejor», comentó el español.
GRANDE PRÊMIO cubre in situ la primera semana de pruebas de Fórmula 1 en el Circuit de Barcelona-Catalunya con Eric Calduch. Además, GP sigue todo en VIVO y EN TIEMPO REAL.
¿Cómo se desencadenó la guerra entre Rusia y Ucrania?
La tensión entre Rusia y Ucrania pone en alerta a todo el continente europeo y también salpica al ámbito deportivo. Por lo tanto, a primera hora de la mañana del miércoles, la Fórmula 1 emitió un breve comunicado sobre la situación del GP de Rusia.
«La Fórmula 1 está siguiendo de cerca los acontecimientos en curso y en este momento no tiene ningún comentario sobre la carrera programada para septiembre. Seguiremos vigilando la situación», decía la nota enviada por la F1 a los periodistas presentes en Montmeló-Barcelona.
Previamente, este lunes, el presidente ruso Vladimir Putin reconoció, mediante un decreto, la independencia de las provincias separatistas de Donetsk y Luhansk. La medida generó sanciones de la Unión Europea y Estados Unidos al gobierno y a las empresas del país, aumentando también el temor a un enfrentamiento en la región.
El jueves, Rusia atacó a Ucrania en un movimiento calificado por Kiev como una «invasión total». A las 5:45 de la madrugada de Moscú, Vladimir Putin, presidente de Rusia, anunció en un comunicado una «operación militar especial» para «proteger a la población del Donbass», una zona de mayoría étnica rusa en el este de Ucrania.
El mando militar ruso afirmó que «las armas de precisión están degradando la infraestructura militar, las bases aéreas y la aviación de las Fuerzas Armadas de Ucrania». Según la cadena británica BBC, hay informes de tropas que cruzan varios puntos de la frontera y explosiones cerca de las principales ciudades del país, no sólo en Donbass, donde los grupos separatistas han sido reconocidos por Rusia.
En la televisión, Putin dijo que Rusia no planea una ocupación de Ucrania, pero amenazó con una respuesta «inmediata» a cualquiera que intente perturbar la operación actual. El gobernante ruso recomendó a los soldados ucranianos que se rindieran y volvieran a casa. «De lo contrario, se culparía a la propia Ucrania del derramamiento de sangre», consideró Putin.
El presidente ucraniano Volodymyr Zelensky decretó la ley marcial en todo el país, instituyendo un régimen de guerra y convocando a gran parte de los reservistas de las fuerzas armadas. En las últimas horas, hay numerosas imágenes de ciudadanos ucranianos que intentan huir de la capital, Kiev, en coche o en transporte público. Además, hay colas en los cajeros automáticos y en los supermercados.
Según las autoridades ucranianas, hasta ahora hay al menos siete muertos y 19 desaparecidos. Se trata del conflicto militar más grave de Europa en la que está implicada una potencia nuclear y una de las mayores desde la Segunda Guerra Mundial.