Montoya bromea sobre su temperamento y dice que hoy sería «echado rápidamente» de F1
Juan Pablo Montoya destacó la «diferencia de educación» respecto a los actuales pilotos de Fórmula 1 y aseguró que, debido a su temperamento, hoy en día lo «echarían» rápidamente de la categoría
Piloto con experiencia en las principales categorías del automovilismo mundial, como la Fórmula 1, Indy, NASCAR e IMSA SportsCar, además de participar en las 24 Horas de Le Mans, Juan Pablo Montoya siempre se ha caracterizado por ser un personaje interesante durante su paso por la máxima categoría del automovilismo. Sin pelos en la lengua, el colombiano era rápido en expresar su opinión fuera de la pista y muy duro en ella.
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En la actualidad, Montoya ejerce de guía de paddock en algunas etapas de la Fórmula 1 y sigue la carrera de su hijo Sebastián, piloto de Campos en la Fórmula 3. Preguntado por las diferencias entre la categoría ahora y cuando él estaba allí, el piloto bromeó diciendo que probablemente «le echarían» por su comportamiento.
«Me echarían del deporte muy rápido [hoy en día]», dijo Montoya al portal GPBlog. «La forma en que crecimos era muy diferente. No se trata sólo de mí, sino de todo el mundo. Antes era un deporte muy cultural, pero ahora es un poco diferente», dijo el colombiano.
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La carrera de Montoya, sin embargo, aún no ha terminado. A sus 48 años, el colombiano ha confirmado su regreso a la NASCAR en la ronda de Watkins Glen, el 15 de septiembre. Diez años después de competir por última vez en la categoría, el piloto se hará cargo del auto #50 de 23XI Racing y estará acompañado por Bubba Wallace en el #23 y Tyler Reddick en el #45.
En Fórmula 1, Montoya disputó 94 carreras en total y ganó siete veces: Italia-2001, Mónaco-2003, Alemania-2003, Brasil-2004, Inglaterra-2005, Italia-2005 y Brasil-2005. El colombiano rivalizó con Michael Schumacher, que estaba en su mejor momento en Ferrari, y terminó tercero en el campeonato en 2002 y 2003 para Williams.
Tras llegar a la categoría en 2001, el colombiano dejó la F1 en 2007 después de dos años en McLaren y se aventuró en el mundo de las carreras de resistencia, así como en la propia NASCAR.