#ViejoTaller: Hamilton se equivoca en China y se complica en la lucha por el título
En su año de debut en la Fórmula 1, Lewis Hamilton vio complicada su oportunidad de conseguir su primer título mundial en la penúltima prueba del año, en China, cuando cometió un simple error y se atascó en la grava. Dos semanas después, Kimi Räikkönen lograría el título mundial.
Heptacampeón mundial, dueño de muchos de los récords más importantes de la Fórmula 1 y uno de los nombres más grandes de la historia de este deporte, Lewis Hamilton sufrió su primer gran revés en la categoría reina hace exactamente 15 años, en el Gran Premio de China de 2007. Aquel lejano domingo 7 de octubre, la carrera de Shanghai podría haber definido el primer título mundial del británico en su año de debut.
El campeonato de 2007 estuvo marcado por un ambiente beligerante en McLaren, entre el bicampeón mundial Fernando Alonso, que esperaba recibir ciertos beneficios de la escudería, y el novato británico, que a sus 22 años llegava a la F1 a lo grande. A pesar del talento ya conocido del prodigio, el rendimiento del británico en su año de debut impresionó al mundo, e incluso con el terrible ambiente interno, Hamilton llegó a la penúltima ronda del campeonato liderando la tabla.
El cálculo era sencillo: Hamilton tenía 107 puntos, Alonso 95, Kimi Räikkönen 90 y el calendario llegaba a su fin: sólo quedaban dos carreras, China y Brasil. Así, un quinto puesto sellaría el triunfo del inglés, en una época en la que la F1 repartía menos puntos a los pilotos.
VER TAMBIÉN
Evolución de la F1: Russell en los intermedios casi iguala la pole de Senna en 1988 en Japón
En ese momento, sólo puntuaban los ocho primeros: el ganador recibía 10 puntos, el segundo obtenía ocho, el tercero seis y el cuarto cinco, con un punto menos hasta el octavo puesto. Así que cuatro puntos serían suficientes: un quinto puesto o dos séptimos puestos en las rondas finales.
Todo apuntaba a un nuevo resultado positivo para el entonces novato, que ya contaba con 12 podios en sus primeras 15 carreras de Fórmula 1: ganar otro esta vez significaría sellar el título. Las cosas empezaron bien el sábado, con una vuelta en 1:35.908 en la Q3 que le valió la pole a Hamilton. Räikkönen saldría segundo, con Felipe Massa tercero y Alonso completando la segunda fila.
Al día siguiente, la lluvia hizo acto de presencia en el circuito de Shanghai, que comenzó la carrera con los procedimientos normales y todos los pilotos con neumáticos intermedios. Hamilton hizo una buena salida y mantuvo el liderato hasta el segundo stint, cuando ya había parado a repostar, al igual que Räikkönen.
¡Conoce el canal de Grande Prêmio en Español en YouTube!
¡Sigue a Grande Prêmio en Español en Twitter y en Instagram!
Fue a partir de este momento cuando la pista de China empezó a secarse, y los neumáticos intermedios de Hamilton -más deteriorados que los de Räikkönen, que había intentado un overcut- empezaron a desgastarse a un ritmo alarmante. El finlandés se puso en cabeza en la vuelta 29, y Lewis dio otra vuelta en la pista en lugar de cambiar a los slick.
Sin embargo, la decisión resultó ser un error: en el 30º giro, el piloto de McLaren se dirigió a los boxes y se salió del trazado, cayendo en la grava justo antes de la entrada al pit-lane. El británico, desesperado, pidió que empujaran su coche, pero los funcionarios no pudieron hacer nada. Ese fue el final de la etapa para el novato, que vio como Räikkönen mantenía el liderato hasta la bandera a cuadros y cruzaba la meta a 9s8 de Alonso. Massa completó el podio.
Dos semanas más tarde, el 21 de octubre, la tragedia llegaría a su fin: en el GP de Brasil, la última carrera de la temporada, Räikkönen consiguió una nueva victoria para Ferrari y el título de campeón mundial de pilotos, con Hamilton sólo séptimo. Al final, la clasificación mostró al finlandés con 110 puntos y al dúo de McLaren empatado con 109, en uno de los finales de campeonato más ajustados de la historia.