Kirkwood revela impacto de 80G tras toque con Rosenqvist en Indy 500: «Estaba volando»

Kyle Kirkwood reveló que tuvo que soportar un impacto de 80G contra el muro de Indianápolis luego de tocarse con Felix Rosenqvist a 14 vueltas del final de las Indy 500.

El momento en que Kyle Kirkwood se tocó con Felix Rosenqvist y su neumático voló en dirección a las tribunas. (Vídeo: NBC)

De los muchos accidentes que se produjeron en la 107ª edición de las 500 Millas de Indianápolis, uno de los más aterradores fue el protagonizado por Kyle Kirkwood y Felix Rosenqvist. En la curva 2, a 17 vueltas del final, el sueco derrapó y golpeó el muro dos veces. En ese instante, el auto #6 volvió al medio de la pista justo cuando estaba por pasar Kirkwood. Y como consecuencia, la rueda trasera izquierda del auto #27 golpeó a su rival y salió volando fuera de la pista. Por el impacto, el piloto de Andretti terminó contra el muro y se mantuvo volcado durante varios metros hasta que se detuvo.

Ambos pilotos salieron ilesos, pero Kirkwood reveló que su auto sufrió una desaceleración de 80G al chocar contra el muro.

«Cuando tuve el primer impacto fue de unos 80G, obviamente estaba ‘volando’ dentro del coche», contó. «Creo que mi rodilla derecha golpeó la barra de dirección y quedó un poco magullada. Pero 20 minutos después estaba caminando sin problemas. Por suerte estoy bien», siguió.

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Kyle Kirkwood y Felix Rosenqvist se accidentaron a 15 vueltas del final de la Indy 500. (Foto: Reproducción)

«Tengo que dar las gracias a los médicos de la Indy, lo que han hecho en los últimos 20 años es absolutamente fenomenal. Tener estos accidentes y salir ileso, me quito el sombrero ante ustedes, son increíbles», continuó.

Uno de los neumáticos del auto del estadounidense llegó a volar hacia la tribuna, pero por suerte no golpeó a nadie: acabó en el estacionamiento del circuito, tras chocar contra un Chevrolet Cruze perteneciente a un aficionada.

Kirkwood lamentó, sin embargo, su resultado final en la carrera, ya que creía que tenía lo necesario para luchar por la victoria en la Indy 500.

«Empezamos 15º y acabamos segundos en la última parada, sentíamos que teníamos un coche ganador. Tenía grandes esperanzas [de ganar], pasamos del 12º al segundo puesto en un solo stint, sólo tuvimos una parada en boxes un poco lenta. Pero creo que el sexto puesto era suficiente para competir en las últimas 17 vueltas», concluyó.